1. Sauna en Familia


    Fecha: 05/08/2019, Categorías: Gays Autor: Nauj69, Fuente: SexoSinTabues30

    ... tío.
    
    Fernando jadeaba de placer al sentir la suave manito de su sobrino atender su erguida hombría; mientras Francisco seguía quejándose entre dientes y su hijo simplemente obedecía los mandatos degenerados de los otros dos machos.
    
    A este punto el adolescente ya había caído de rodillas al suelo del sauna y en medio de los tres hombrones que conformaban su familia, el chico por primera vez masturbaba vergas que no fueran la suya. Y aquellos no eran cualquier miembro masculino; eran unos tan enormes, recios y venosos que hasta parecían ser musculosos, que Fabricio no podía esperar a crecer y tenerlos igual a ellos. Y justo en lo que él contemplaba esos instrumentos inseminadores, sintió que algo lo sujetaba de la cabeza y lo empujaba hacia enfrente y abajo, justo en donde estaba la peluda y colosal verga de su padre.
    
    –¡Sobrinito, ahora usa la boca! —Dijo el desmedido de Fernando e hizo que el desprevenido joven no tuviera más remedio que engullirse la carne viril de su propio progenitor.
    
    –¡¡HEY, ALTO!! —Soltó Francisco, atónito de lo que su padre y hermano estaban haciendo con él y su pequeño hijo–¡Esto ha ido demasiado lejos! ¡Ya Basta!
    
    –¡Nnnghh~! ¡Agh~! ¡Nnnghh~!—Era lo único que salía de la boca llena de Fabricio; mismo que tenía la mitad de la vergota de su papá hasta la faringe, tan adentro que cuando le pasaba de la campanilla le daban fuertes arcadas.
    
    –¡Oh, vamos hermano! ¡Déjate de dramas! Sólo mira lo duro que estás, tanto como lo estaría yo si fuera un hijo mío el que me la estuviera mamando así de rico.
    
    –Sí, hijo. —Agregó don Federico y él también se puso a empujar a Fabricio para que este se atorara más con la carne masculina de su progenitor–Mejor disfrútalo. Ya me hubiera gustado a mí que ustedes me la hubieran comido a esta edad…o de más nenitos.
    
    –Pero papá… —Francisco quiso discutir, pero el placer no le dejó–¡Ooohhh…Joder! ¡Sí, así…!
    
    Ya toda la situación familiar se había salido de control, y control era algo que el abrumado papá de Fabricio ya no tenía. El sentir su enorme verga hasta la garganta de su vástago le causaba una lujuria desmedida y ahora su propio padre lo manoseaba todo y le confesaba una serie de obscenidades que aumentaban su morbo; al mismo tiempo que su hermano también lo tocaba y le estrujaba los pezones. Y en cuanto al joven de Fabricio, a este ya no lo obligaban a mamar; él lo hacía voluntariamente y por puro instinto; lamiendo y chupando el enrojecido glande de su papá, mientras con una mano continuaba masturbando el resto del enorme tronco de ese leño y con la otra le masajeaba los huevos que colgaban bien cargados de leche de semental.
    
    Los tres machos se apretujaban unos contra los otros, frotando sus robustos cuerpos y mezclando sus sudores y hedores, de tal forma que sus vergotas estaban al alcance del chico; quien volvió a agarrar los falos de su abuelo y tío, uno en cada mano, y los pajeaba a la vez que con sus fauces succionaba el miembro por el que él había nacido. Y ...
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