1. Escapada a la montaña con mi madre (XII)


    Fecha: 17/07/2019, Categorías: Incesto Autor: Edipo14_, Fuente: CuentoRelatos

    ... coleta improvisada, mientras se arrodillaba a los pies de la cama, dejando a la altura perfecta mi polla de su boca. De esta manera escupió sobre esta y, sin preliminar alguno, se la introdujo hasta lo mas hondo, ocasionando un pequeño sonido de arcada y haciéndome sentir cada rincón de su garganta. Empezó de esta manera una mamada totalmente desatada, la cual iba alternando entre gargantas profundas y salivadas pajas, momentos que aprovechaba para recuperar un poco de aire.
    
    Pasados varios minutos sentía que iba a reventar. Mi madre seguía chupando y chupando, pareciendo incluso por momentos estar poseída por algún tipo de demonio lujurioso. Pero no, ese no era ningún demonio, era la depravación de una madre totalmente sometida al incesto con su propio hijo. Yo no aguantaría mucho más, quería correrme, y por mucho que me gustara correrme en su boca, esta vez necesitaba algo mejor. Sin pensármelo dos veces y presa del deseo, la agarré del pelo, cortando su rica y salivada mamada y poniéndola de pie para, acto seguido, tirarla sin cuidado ninguno sobre la cama. Ella captó al instante lo que estaba pasando, e instintivamente se puso a cuatro patas, con su cabeza apoyada sobre el montón de ropa, y su espalda completamente arqueada, haciendo que su culo quedara en perfecta posición. Si yo ya iba loco, la imagen de mi madre meneando el culo esperando a ser ensartada me puso completamente malo, por lo que metí mi polla lo más rápido que pude en su coño, el cual estaba tan mojado que se sintió como un cuchillo caliente cortando mantequilla. Nada más meterla ambos soltamos un gemido de puro placer, comenzando así una follada dura y rápida.
    
    -Aggh... Joder así hijo así... Dios llevo toda la noche deseando esto... ¡Más..! ¡Dame más fuerte!
    
    -¿Te gusta eh? Agghhh... Sabía que chuparle la polla a tu hijo no iba a ser suficiente para ti... ¿Verdad mami? -dije mientras le soltaba un par de azotes en ese gran y precioso culo, el cual rebotaba una y otra vez sobre mis caderas-.
    
    -Aah... No amor... Uf... Sabes que mami siempre necesita que te la folles así rico... ¡Aghhh...!
    
    Si bien hacía unos instantes estaba a punto de correrme en la boca de mi madre, el cambio de posición me había dado el tiempo suficiente para refrescarme, por lo que ahora bombeaba con total seguridad de que iba a ser ella la primera en alcanzar el orgasmo. Y efectivamente, así sucedió. Pasados apenas un par de minutos mi madre comenzó a anunciar su inminente corrida, por lo que yo aceleré aún más el ritmo, agarrándola de la nuca y pegándole la cabeza al colchón. Después de un par de embestidas pude notar como su vagina comenzaba a contraerse entre espasmos, y como sus piernas temblaban de puro placer, mientras sus gritos inundaban la habitación. Ella se había corrido, pero a mí todavía me faltaba un poco, por lo que decidí no detener mi labor. Podría haber hecho que me la chupara, o haberla sacado para pajearme y acabar sobre ella, pero no quería eso, quería correrme dentro, y era ...
«12...91011...17»