1. EL DETECTIVE PRIVADO. (9)


    Fecha: 17/07/2019, Categorías: Hetero Autor: GUILLEOS1, Fuente: SexoSinTabues30

    ... enseñándome las artes de ataque y defensa, trocaban a la de un maestro que sabía ahondar en lo profundo por lo que su alumno pudiera estar pasando. Su Filosofía y su modo de encarar las problemáticas se contraponía con nuestra mentalidad occidental, pero terminaba convenciéndote de lo que fuera, tanto así que parecía que fuera uno mismo el que decidía al respecto.
    
    No le conté de lo que había vivido o sentido en los casos en que me tocó intervenir, tampoco me lo hubiera permitido, pero le expuse mis dudas al respecto deCandela y de mi proceder con ella…“Tu sabés lo que pretendes lograr y te preparas para eso, si la persona que quieres tener al lado no te acepta totalmente con tu modo de pensar, es inútil intentar cambios o adaptarse al proceder del otro, tarde o temprano esos cambios o adaptaciones se pagan con disgustos. No se puede ser un ogro y por estar al lado merece todas las atenciones, pero… para estar debe aceptar, sino, es preferible que no esté”.
    
    Después de esto, en que más claro no pudo ser, hicimos unos ejercicios de concentración para evitar“hacerme la cabeza” con lo que no correspondía y para tomar las mejores decisiones llegado el caso, incluso con lo que no tuviera que ver conCandela. Luego de que se fue el relax era total y además del baño reparador la cama parecía llamarme para reponer la noche de mal sueño y para recuperarme del cansancio que me dejó el entrenamiento.
    
    Me desperté como a las siete y media de la tarde, estaba descansado y sin ningún tipo de cargas o de temores, había decidido que, aunque existían sentimientos haciaCandela, podía llegar a asumir el hecho de apartarme si ella no cumplía mis expectativas,¡qué joder!, mujeres sobraban y ninguna me llevaría de las narices. El teléfono me sacó de mis pensamientos, lo atendí porque eraGloria.
    
    Me venía genial que aparecieraGloria, el culito“pedigüeño” de mi suegra me podía y me encantaba que se entregara sin ningún tipo de pruritos. Escuché el ascensor y esperé a que apareciera en la puerta, verla aparecer con sus zapatos de taco alto y el vestido de noche negro escotado, con falda semi acampanada que le quedaba unos diez centímetros por arriba de las rodillas y una campera más clara que parecía de terciopelo, todo lo cual hacía resaltar su cabellera rubia, hizo que asomaran mis colmillos.
    
    Dejó la cartera que traía sobre el sofá y se apresuró a meterse en medio de mis brazos abiertos, me abrazó pasando sus brazos por mi cintura y levantó la cara para que nos pudiéramos“comer” la boca. Las lenguas se trenzaron y los labios de uno y de otro parecían sopapas, el gemido fue instantáneo cuando mis manos se adueñaron de sus nalgas y el apretón de ambas durezas pareció incentivar sus besos.“Desnudame vos”, -pidió con voz dulce y cargada de deseo apartándose un instante de mis labios-.
    
    Me ponía a mil su entrega y la campera pronto quedó sobre el sofá, bajé los breteles finos del vestido sabiendo que no usaba sostén y sin que mediaran más palabras, dejé su boca ...
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