1. La vida de Janna final


    Fecha: 09/07/2019, Categorías: No Consentido Autor: charlines, Fuente: TodoRelatos

    ... había sentido tanto placer.
    
    - Déjame que me reponga y te devolveré una parte del placer que me has dado, yo soy inexperta, pero pondré todas mis ganas. ¿Por cierto, no habrán pasado por aquí Tres hombres, uno con una cicatriz, otro sin dedos y el último sin una pierna??
    
    La joven empezó a temblar, su cara se tornó de pánico y Janna tuvo que agarrarla con fuerza.
    
    - Esos, esos hijos de puta me violaron y me pegaron. Pasaron por aquí hace un par de días
    
    - No te preocupes, voy tras ellos y terminaré con sus vidas, no lo dudes.
    
    ¿Quieres algo de ellos?
    
    - La cabeza del de la cicatriz.
    
    - La tendrás, no lo dudes.
    
    Janna lentamente bajó por ese joven cuerpo besando su cuello y sus pechos y acariciando por primera vez el sexo de una mujer. Notó su humedad a la vez que sus dedos acariciaban los labios del sexo de la joven. Besaba su boca ávida de deseo. Uno de sus dedos penetró dentro de la chica y lo empezó a meter y sacar con mucha lentitud. Bajó su boca hasta tocar los tenues pelillos de ese casi lampiño coñito. Paso su lengua intentando conocer los sabores de ese sexo y le gustó. Sacó su lengua, recorrió el espacio entre los labios y fue metiendo su lengua lentamente. Janna recogía los líquidos de la joven con su lengua mientras está dirigía su cabeza hacia su clítoris. Janna comprendió que ese era el lugar donde antes ella le había proporcionado tanto placer y lo atacó, lo atacó con todas sus ganas, quería oír los gemidos de esa joven que tanto placer le había dado. Mojó su dedo índice y lo acercó al culito de la joven. A la vez que lo chupaba, acariciaba tan estrecho orificio y notaba como la joven se retorcía en la cama, buscando el máximo placer. Tras varios minutos chupando y acariciando, Janna notó como una cascada invadía su boca a la vez que apretaban su cabeza contra el sexo y las piernas le oprimían la cabeza entre ellas. La muchacha arqueo su espalda y casi clavó la cabeza de Janna entre sus piernas
    
    - Joder, joder, joder, para ser la primera vez casi me matas.
    
    Volviéndose, besó largamente la boca de Janna y se acurrucó a su lado.
    
    Al día siguiente en cuanto hubo salido el sol, Janna montó su caballo y partió en busca de los tres cuatreros.
    
    Al llegar a St Elmo, nada más entrar en su calle principal, vio tres ataúdes recién construidos. Por un momento pensó que se le habían adelantado, pero nada más lejos de la realidad. El sheriff su ayudante y un paisano habían sido asesinados por los tres hombres. Entró en el saloon y preguntó por ellos. Una joven con la cara amoratada por los golpes le dijo que habían salido temprano del pueblo y que al paso que iban, no andarían muy lejos.
    
    - Esos hijos de puta me dieron una buena paliza y me violaron aquí, en medio del saloon.
    
    Janna la preguntó en qué dirección los vio partir y una vez la mujer se lo hubo dicho, montó en su caballo y partió tras ellos. Janna había aprendido muchas cosas con Alan y una de ellas era seguir el rastro de animales y personas. Sabía que no ...