1. La mamá de Joaquín. Cap 1


    Fecha: 28/06/2019, Categorías: Infidelidad Autor: dickson33, Fuente: RelatosEróticos

    ... a nadie. No quiero que vuelvas a meterle una mano encima, sino vas a ver.
    
    Se puso muy cerca de mí. Sentía su respiración agitada y el rico perfume que dependía. Me dieron ganas de comerle esa boca carnosa que tiene.
    
    —Si él no me jode, va a estar todo bien —le contesté.
    
    —Más te vale. —me dijo, señalándome con una uña larga pintada de rojo.
    
    Se puso los anteojos y se fue, meneando ese orto que simplemente puedo describir como perfecto.
    
    Nos quedamos callados un rato. Es raro que los pibes no tengan nada que decir.
    
    —Está terrible la mamá de Joaco. —dijo alguno de ellos, después de un buen rato.
    
    —Me parece que está mejor que la profe Miriam. — dijo Brian.
    
    ,—De culo empatan, pero de tetas y cara, esta le gana a goleada. —acotó Leo.
    
    — he, que putito este Joaquín,. Ir a quejarse con su mami… —dijo el Brian —la que le espera el lunes ¿No Pitu?
    
    No dije nada. Apenas lo había escuchado. Tenía en mi mente el hermoso culo, la piel suave, las tetas, cuyos pezones se marcaban en la remera, el perfume de hembra que llevaba impregnado en todo su cuerpo, y esos tremendos ojos azules.
    
    A la noche le dediqué una paja. Estuve media hora acariciándome la pija. Era cierto, estaba más buena que la profe Miriam. Y eso era mucho decir, ya que la profe eras la mujer de mis sueños. Cuando acabé, no pude evitar largar un gemido. Mi hermano., por suerte, no se despertó. Un montón se semen cayó sobre mi ombligo y sobre los pendejos de mi pelvis. Lo raro es que todavía estaba al palo. Bajé de un salto de la cama. Fui al baño. Me senté en el inodoro, y con la mente todavía en la mamá de Joaquín, le dediqué otra paja.
    
    Me tenía que coger a esa mina. No sabía cómo iba a lograrlo, pero de alguna manera lo haría.
    
    Joaquín
    
    Nunca odié tanto a mamá como ese día. ¡Cómo se le ocurrió ir a encarar a Pitu en la escuela! ¿No entiende que con eso las cosas van a ser peores?
    
    —Es que me quedé recaliente porque el director de la escuela me dijo que como la pelea fue fuera del establecimiento, ellos no podían hacer nada, ¡una locura! —, me explicó mamá esa tarde.
    
    El fin de semana fue una tortura.
    
    Papá había descubierto las heridas, pero como habían cicatrizado bastante, y mi cara se había descinchado, le mentí diciéndole que me había caído de geta en la clase de educación física. ¡Me da una pena el viejo! Anda como un fantasma todo el día. Lo veo poco, porque por las noches trabaja, y de día duerme. Pero cuando lo veo, no me banco su cara de tristeza. Me quiero matar. El pobre tenía todo y ahora no tiene nada. Yo lo entiendo, porque a mí me pasa básicamente lo mismo. Pero al menos tengo toda la vida por delante.
    
    Papá ya araña los cincuenta. Y no creo que consiga trabajo en otro lugar más que en esa empresa de seguridad.
    
    Mamá en cambio, es todavía muy joven. Tiene catorce años menos que él.
    
    Esa es otra cosa que me perturba. ¿Se separarán? La diferencia de edad es cada vez más obvia. No me imagino una vida sin los dos juntos, pero últimamente ...
«12...456...»