1. La familia Kapusta. Capítulo 1


    Fecha: 25/06/2019, Categorías: Incesto Autor: fuego de Hefesto, Fuente: TodoRelatos

    ... más que evidente, ella esperaba seguir así un poco más.
    
    ¾Ahora entiendo lo de Pablo. Eres un celoso, un niñato que solo quiere a su madre para él. ¿Qué quieres casarte con tu mamá?—lo último lo añadió con una voz que fingía ser una niña pequeña—o bajarme las bragas como todos desean, para follarme y dejarme bien preñada… para que todos hablen… ¡Mira esa puta… preñada y divorciada! A saber con quién se acuesta si vive sola con su hijo….
    
    ¾No es nada de eso…. ¡Menuda película te acabas de montar tu solita…!
    
    La voz sonó inquisitiva. Se había echado hacia adelante contra el cuerpo de su madre que había topado contra la pared sin poder alejarse más de él. Estaban a escasos milímetros, de la boca del joven brotaba un caliente aire que golpeaba en los labios de la mujer. Sus respiraciones estaban agitadas y el corazón les corría como un fórmula 1. Los ojos del muchacho no dejaban de mirar a la mujer que esperaba algo más después de aquel no y de contarles irónicamente lo que deseaba de su joven hijo… solo esperaba que Andrzej fuera lo suficientemente listo para leer entre líneas cuanto deseaba que sucediera. Toda su autoridad parecía haberse borrado con aquellas palabras, se sentía atenazada. Los brazos fuertes de su hijo apoyados en el suelo cerca de ella no la dejarían escapar, su robusto cuerpo sería una losa si se pusiera encima. Sin embargo… unos sentimientos afloraron en la mujer, lo que de verdad quería era que no la dejaran escapar jamás, que la apestillara y la dominara un macho… necesitaba ser poseída con lujuria, con pasión, con maestría y con una follada que le dejara los ojos en blanco.
    
    ¾…Lo que quiero—le dijo Andrzej en un susurro muy cerca de sus labios— es que me vuelvas a querer. Que me trates con amor, que vuelvas a ser mi madre y… si quieres… follarte cuando me lo pidas… me encantaría hacerlo contigo.
    
    Las palabras le produjeron repulsa, pero también un placer tan frenético que su vagina le comenzó a carburar como loca. Nunca le habían dicho algo tan claro, nunca la habían hablado así era lo más erótico que se podía imaginar. Con cualquier otra persona habría sido algo de lo más sexual, pero al escucharlo de los labios de su hijo algo fallaba. No era lo natural, o tal vez sí, la atracción sexual no es algo que se piense, no tiene nada que ver con el raciocinio.
    
    ¾Aunque lo mejor de todo—volvió a decir Andrzej mirando hacia su entrepierna mientras las tetas de su madre se movían como locos respirando acelerada— es que me sigues sujetando la polla…, la necesitas y ella te necesita a ti. Ahí hay un acuerdo
    
    Era cierto. Monika no se había dado cuenta, pero mientras su hijo estaba casi sobre ella, su mano seguía agarrando la dureza de esa polla joven, aunque con una diferencia, ahora la acariciaba. Echó un vistazo entre sus dos cuerpos como la polla de Andrzej, tan grande, tan gorda, tan bonita… era acariciado por una mano que ahora se veía diminuta. Su tacto era maravilloso, una capa de delicada seda que cubría el poder ...
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