1. LEYENDO EL DIARIO DE PIRUCHA. (III) En la prisión… y después de…


    Fecha: 07/02/2022, Categorías: Dominación / BDSM Fetichismo Gays Autor: Ruizy, Fuente: SexoSinTabues30

    -Mi morbo no tenía límites. En la noche, sabía que la calentura del día se aplacaría con las culIadas que me daría mi macho. -Sólo que en mi caso se quedó conmigo como su perra y no me dejó de dar hasta que a los seis días salí en libertad. Las noches fueron eternas y llenas de placer con ese macho dominante. Casi no dormí en esa semana. Eternamente enculado por mi macho…Y sometido a todos sus caprichos.
    
    Estimado lector: La lectura del diario había dejado pendiente la historia de lo ocurrido dentro de la prisión y luego fuera de ella y lo sorprendente es que siguió ocurriendo esa interacción, pero de un modo distinto. Siempre con los ribetes del erotismo que linda lo pornográfico.
    
    Salió hace algunos años y me buscó. Ahora cada cierto tiempo recordamos esas noches en que fui su hembra… Volvemos a recordarlo con gran placer de ambos…Pero ahora ya no lleva las riendas del poder y soy yo quien se da el gusto de someterlo.
    
    Prometí contar las otras cinco noches y cinco días que venían antes de obtener mi libertad. Y como fui una entera perra en celo suelta entre una jauría de mastines que se revolvían en torno de mí al sentir las emanaciones que brotaban de mi culo sediento de placer y de vergas. Hasta mi género cambió y mi relato lo haré como lo que soy: una hembra, una puta…
    
    La mañana después en que tuve mi rito de iniciación fue el del triunfo de la reina. Así me sentía de poderosa. Sabía que ejercía un embrujo lujurioso entre aquellos machos sedientos. Me solazaba provocándolos. Me paseaba semidesnuda sintiendo las miradas clavadas en mis caderas, que contoneaba como hacen las modelos de pasarela, en mis nalgas que proyectaba hacia atrás para darles volumen… Yo misma sentía erizados golpes de magnética excitación en la entrada de mi culo y alrededor de mi cuerpo… Si se hubiera dado la oportunidad, me sentía dispuesta a ser follada por decenas de penes que depositaran su lechosa y apetecida carga en mi interior. Me veía enculada una y otra vez, llena de semen y chorreando, escurriéndose por mis piernas… La certeza de que era intocable, me llenaba de una energía increíble… Ni la princesa rusa se comparaba con la calentura que sentía…
    
    Esa noche, después de la culeada de rigor de mi macho, recibí la noticia…No sin cierta desazón, porque partía a un universo desconocido y sin la protección de mi hombre.
    
    -Reina- me dijo- lo siento, hice un trato con los guardias que me reportará muchos beneficios. -Mi cielo, no tienes que darme explicaciones. Soy tuya, tu propiedad y puedes hacer lo que quieras conmigo. Soy tu esclava…dispuesta a lo que quieras hacer conmigo…mientras sea tu perra, aceptaré todo de ti… -Así me gusta que entiendas lo que ocurre. No te preocupes, si no es acá, no faltará la ocasión de recompensarte fuera de la prisión. Sé que no estarás mucho tiempo con nosotros…
    
    -Mi amo, mi señor – le dije poniendo la cara más sumisa y cautivadora. Lo sé. Y sé que me buscarás después y podremos realizar todo lo que quede inconcluso. ...
«1234...»