1. Una cita médica bien placentera


    Fecha: 21/06/2019, Categorías: Anal Autor: Natalia Arango, Fuente: TodoRelatos

    ... y lo seguí.
    
    Entramos a su consultorio, y él se sentó en la silla de su escritorio, me dijo que cerrara la puerta y me sentara, yo cierro la puerta y me siento al frente de el junto a su escritorio, saca una tablet que tenía en una de sus gavetas atrás en el archivador, y comienza a hacerme varias preguntas. Al principio era preguntas normales, como si sentía dolores, sufría de algo, o cosas así, pero las preguntas se comenzaron a poner algo picantes, cualquier otra mujer, sé que se fuera sentido incomoda, le fuera dicho poco profesional, y lo más seguro es que se fueran ido enojadas, pero yo no, al contrario, me dedique a contestar todas sus preguntas. Cuando le dije que hay ocasiones en las que me duele el pecho, me dijo que también puede ser por mis tetas, ya que son muy grandes, y lo mejor es salirse de dudas, y revisarme, así que me levante del escritorio, me quite mi blusa, el brasier, y los puse en un rincón a la entrada al consultorio.
    
    Volví a sentarme en mi silla, pero ya con mis tetas al aire, y el doctor no dejaba de mirármelas, saco de su escritorio un par de guantes nuevos, se los puso, se levantó de su silla, y camino hacia donde yo estaba. Saco un lapicero del bolsillo de su pantalón, y comenzó a medírmelas, decía que no eran ni tan grandes, ni tan pequeñas, eran el tamaño promedio, hizo ese procedimiento con las dos, y no veía ningún problema raro, así que descarto que mi dolor de pecho fuera por mis tetas. Lo que si me dijo es que estaban un poco irritadas, y eso se debe a tener tanto sexo seguido, así que fue a su archivador, agarro una crema hidratante, y me sobo las tetas, se sentía muy rico, sus manos masajeando mis tetas con esa cremita, me agarraba los pezones, y eso si no tenía que ver con el masaje, era lógico, me estaba comenzando a excitar mucho, mis pezones y mi vagina, son las partes más sensibles de todo mi cuerpo.
    
    Movía mis tetas de arriba hacia abajo, de izquierda a derecha, y formaba circulitos moviéndolas muy despacio, estaba muy caliente, de sentir como me agarraba las tetas, que yo también quise hacer lo mismo, así que mande mi mano directo a su paquete, y le masajee esa rica verga, la cual tenía muy bien guardada, debajo de esos pantalones. Yo no era la única caliente, el también estaba bien calientico, porque tenía esa rica verga ya bien durita, cuando deja de masajear mi verga, yo me giro hacia él, y le bajo esos pantalones del uniforme, como son pantalones suaves, no se puso boxers, así que apenas se los bajo, esa vergota sale de su escondite. También se la masajeo, masturbándolo lentamente, pasando mis manos, de arriba hacia abajo, de una forma muy lenta y suavecita, me pongo su verga en el medio de mis tetas, y le empiezo a hacer una rusita bien deliciosa, lo miro a la cara, para ver esa hermosa carita excitada, y él toma la iniciativa, porque mientras lo miro, él se coge mis tetas muy duro y rápido.
    
    Yo lo miro, y el acaricia mi cara con su mano derecha, me dice que todas sus pacientes se van ...
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