1. Violeta 5


    Fecha: 19/03/2019, Categorías: Incesto Autor: Gomarana, Fuente: SexoSinTabues30

    El rosetón al frente de la iglesia era magnífico, así como los adornos barrocos en las grandes puertas de madera. Lo que no tenía calidad era el video que, tras años de descomposición, se veía oscuro y gastado. Trinidad de unos once años, estaba vestida como pequeña novia, sujetando un ramo entre las manos. Mireva, la madre, usando su acostumbrado antifaz, vestía formalmente para la ocasión y la acompañaba del brazo. Las dos caminaban hacia dentro del recinto. La edición se cortaba en ese momento, para después reanudarse, en uno de los adoratorios, ya dentro de la iglesia. Pensé que, seguramente, la escena habría sido filmada con el templo cerrado al público.
    
    Ahí, aparecían a cuadro: Trinidad, caminando hasta el altar; Mireva entregándola en matrimonio; Jesús, que fungía como el novio, enfundado en un smoking negro y, lo que parecía ser un párroco, usando también un antifaz, oficiando la falsa ceremonia. El único que no salía en escena, pero seguramente estaba ahí, era el director y fotógrafo de la película, el difunto abuelo de Violeta. En un principio la misa (corta como era de esperarse) transitó por los clichés que cualquier mala película te mostraría de una boda. Después el falso enlace omitió la recepción, yéndose directo a la consumación del matrimonio.
    
    – […] y ahora puedes besar a la novia. – dijo el cura, finalizando la ceremonia. Su voz, sonaba más como un deseo reprimido, que al colofón de una misa.
    
    Trinidad y Jesús en ese instante se dieron un tierno beso en la boca. Los dos niños lo hacían suavemente, mientras su papá ejecutaba un zoom out para abrir la toma. Mireva se acercó a su hijo arrodillándose frente a él, bajando lentamente su bragueta. Sacó el pene infantil de Jesús, dándole lengüetazos por todo el tronco, rematando con círculos en el glande. Los dos niños seguían besándose con más lengua que boca. Entonces el párroco caminó hacia los novios, se acercó por detrás a Trinidad, levantó la falda del vestido blanco, bajó sus diminutas bragas y hundió su cara entre las nalgas de la pequeña. En los gemidos de los novios se escuchaba una acústica típica de iglesia. Mireva desnudó por completo a Jesús, obligándolo a separarse de Trinidad, que a su vez, fue desnudada por el sacerdote. Después la madre de los niños cargó a Jesús y lo recostó sobre la mesa del altar para continuar la felación, mientras en primer plano la pequeña novia, ya sin su vestido nupcial, y sólo llevando en sus sienes el velo, era devorada por el párroco, en un sexo oral que la hacía gemir fuertemente. Luego de algunos minutos Mireva con un acento típico de las lenguas eslavas, dijo en su mejor castellano.
    
    – Padrre, crreo quei ya están listos.
    
    – Así es hija, lo están… ¿Tu también lo estás?
    
    – Sí padrre, yo también.
    
    El cura llevó hasta el altar a la pequeña Trinidad, la cargó y la depositó suavemente en el cuerpo de su amado Jesús.
    
    – Y ahora hijos míos, sobre este santísimo lugar de adoración, ¡consumad su matrimonio! – sentenció el cura ...
«1234...12»