Consentida por mis hermanos mayores - Relatos Eróticos

Consentida por mis hermanos mayores

... esto.

- Cállate.

- Si quieres que me calle, méteme la polla en la boca.

Aunque lo hizo claramente enfadado, Enzo se desnudó de cintura para abajo y se sacó la tranca. En cuanto la metió en mi boca, suspiró de placer. La tenía muy grande, apenas me cabía, pero disfruté mamándosela, por el morbo que me daba que fuese él. Mientras, Carlo ya me había metido dos dedos en la vagina y me estaba succionando el clítoris.

Tal y como había imaginado, sus habilidades no tenían nada que ver con las de los niñatos de mi edad. Los adolescentes solo querían meterla en cualquier agujero y correrse a los pocos segundos. Pero Carlo era un experto comiendo coños, absorbía con gusto cada gota de los abundantes fluidos que empapaban mi coño y Enzo tenía mucho aguante, pese a mi forma ansiosa de engullir su tranca.

- Venga, Carlo, haz que tu hermanita se corra en tu boca.

- Y yo me voy a correr en la tuya, Alexandra, así lo has querido.

Cuando Carlo me llevó al orgasmo, mi cuerpo se descontroló de tal manera que, sin querer, me clavé entera la enorme verga de Enzo. Fue entonces cuando él eyaculó, directo a mi garganta. Su leche espesa casi hace que me ahogue, pero lo hizo todo aún más excitante, estaba deseando llevarlos al límite.

- ¿Os creéis ahora que ya no soy una cría?

- Nos lo creeremos cuando te follemos hasta quedarnos secos.

Continuará...