1. La cuñada de Mara quiere que le cuente


    Fecha: 17/03/2019, Categorías: Confesiones Autor: Demian1558, Fuente: CuentoRelatos

    ... roce con la piel que se corría al compás de mis dedos, hizo que no pudiera resistir las ganas de tocarme, me senté sobre mi talón para que se me metiera entre los pliegues de la concha, y con la otra mano me empecé a acariciar el clítoris sobre la bombacha para poder sentir la humedad de mi flujo. Te lo imaginás?
    
    S: Y no sabés cómo, tengo metido dos dedos, y me estoy conteniendo de no meterme otro más porque no quiero terminar: Y en que pensabas mientras le tocabas la pija? En la de mi marido?
    
    M: Y qué te parece, sabés las veces que estuve tentada de hacérselo a Gustavo?
    
    En ese momento Mara al escuchar el nombre de su hermano comenzó a apretarme la pija con toda la mano sobre el calzoncillo, yo estiré mi mano para acariciarle la concha pero ella me negó con la cabeza, la obedecí.
    
    S: Y como se lo harías? como se la hiciste a tu amigo?
    
    M: Sí, igual que a Pablo, pero él quería también pajearme a mí, no lo dejé, quería ser yo la que administrara el placer, que sean mis manos las que manejaran sus deseos y los míos, quería que mis dedos fueran sintiendo el aumento del calor en su tronco, que palparan su dureza, sus palpitaciones reventando sobre la tela, y quería disfrutar la textura de mi clítoris lubricado por el flujo que extraían los dedos de mi raja, y lo esparcían a lo largo de mis labios.
    
    Mara se iba y nos iba calentando cada vez más a Susana y a mí, creo que la sucesión de imágenes era en los tres las mismas, alternaban entre la visión de mi pija y de su concha corrida ya la tanga a un costado, ambos imaginando a Susana seguramente tirada boca abajo en la cama, cogiéndose una almohada, mientras imagina a su cuñada pajeando a Gustavo, como lo estábamos haciendo Mara y yo.
    
    En ese momento se sacó la bombacha y me montó al nivel de la pija, y siguió contándole a Susana:
    
    M: Ya no me bastaba con acariciársela, necesitaba sentirla, me saqué la tanga y me lo monté, ahora sí le metí dos dedos por la bragueta y haciendo palanca le hice saltar la pija, me enloqueció verla tan dura, tan deseando mi concha que estaba ahí a unos centímetros chorreando
    
    S: Contame, te la metiste de golpe?
    
    M: No, quería enloquecerlo y enloquecerme de deseo, con una mano me separé los labios de la concha y con la otra me comencé a refregar la cabeza de la pija a lo largo de la raja, dejando que se meta un poco la puntita, cada vez que pasaba esto Pablo levantaba la pelvis intentando meterla, pero yo me elevaba.
    
    S: Qué hija de puta que sos!
    
    Mara jadeaba mientras hablaba porque eso que le estaba contando ya había pasado hacía unos minutos, ahora no había aguantado más y se la había ensartado hasta los huevos y me miraba con una cara lujuriosa que me calentaba casi igual que la tibieza de sus concha. Ahora sí me dejaba moverme metiéndosela y sacándosela desesperadamente, yo oía a Susana que le rogaba que siguiera porque estaba por terminar, pero Mara estaba desenfrenada moviendo la pelvis de adelante hacia atrás para sentirla bien adentro, su ...