1. Mi primo fue quien sí me penetro profundamente


    Fecha: 19/05/2019, Categorías: Confesiones Autor: Maria Luisa, Fuente: TodoRelatos

    ... tener muchos chicos detrás de ud en el cole, parece una modelo con ese traje de baño, que linda mi cuñi, que lindo su caminito de pelitos, voy a terminar con su hermana y me voy a hacer su novio. Yo super alagada y como saben, por el relato anterior, estaba destinada a tener una relación prohibida con él, por envidia a mi hermana, le coqueteaba y varias veces en la playa él fue mi caballo en el juego de peleas sobre hombros e hice que sintiera mis tetas apretadas por las hormonas en su espalda también, notaba como me agarraba por mi cintura de avispa. También sentí su verga entre mis nalgas entre forcejeos de los juegos.
    
    Ya de retorno a la casa de mis tíos, en varias oportunidades los primos nos metimos en el cuarto sin supervisión a ver pelis en DVD. Apagábamos la luz. Leo y yo siempre juntos, el cuarto tenía dos camas individuales y a los pies de una de ellas el TV. Leo y yo nos sentábamos en el piso, frente al TV y a espaldas de la cama, en la cama dos de mis primas con un primo.
    
    La temperatura era fría, para empeorar la confidencia, apagábamos la luz, el control del DVD lo tenía LEO y nos arropábamos con un edredón. Como he dicho, soy súper cariñosa, en realidad cachonda, abrazaba a Leo o me metía bajo su brazo mientras veíamos la peli, se lo apretaba y sentía sus músculos.
    
    Un día, ya las caricias sanas se fueron convirtiendo en caricias de Leo en mi pierna y poco a poco su mano fue bajando hacia mi cosita húmeda. Ese día yo andaba de franelon, lo cual es una franela que llega hasta media pierna, es como un vestidito de franela, sin nada más abajo que mi pataleta de muñequitos, pues estábamos en casa de mis tíos, ya de tarde casi para irnos a dormir, así que yo estaba recién bañadita y con poca ropa, me ponía crema hidratante de olor a fresas después del baño, obviamente pensando en agradarle a Leo. Mis pezones se notaban sobre el franelon, mi cara, brazos y piernas mostraban el reciente bronceado por la playa, mi piel estaba caliente por el día del sol, mi cuca la sentía fría por fuera cuando no estaba excitada sexualmente.
    
    Cuando Leo empezó a bajar la mano, yo me hacia la que no me daba cuenta, pero quería que me metiera sus dedos hasta lo más adentro. De repente sus dedos haciendo círculos cariñosos tocaron por primera vez mi pantaleta. Allí siguieron tocando hasta que Leo hizo una jugada clásica de macho. Se inventó que estaba incómodo y nos reacomodamos. Ahora leo ya no me dejo cerrar mis piernas y cuando me senté a su lado abrazando mis propias piernas, leo ya había puesto su brazo entre ellas abrazando la pierna que tenía a su lado. Los dos estábamos sentados al lado del otro, con el culo en el piso, las piernas flexionadas y ahora leo con un brazo entre mis piernas, su mano llegaba a mis tobillos.
    
    Su codo ahora estaba en mi panocha super húmeda, seguíamos arropados por la sabana, nadie veía, nadie decía nada, yo sé que varios andábamos en eso. Leo empezó a dar círculos con su codo en mi cuca, yo lo dejaba y hasta ...
«12...567...13»