1. La Vecinita 1


    Fecha: 15/03/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Lyser, Fuente: TodoRelatos

    ... no fue mi intención, hacerle daño alguno, fue un choque fortuito.
    
    -Un choque que me hizo visitar las urgencias, y que todavía me duela el cuerpo.
    
    De un golpe se cerro la puerta. La vieja de mierda amargada me quería arruinar.
    
    Desistí y subí a mi casa de nuevo. Podía pedir un préstamo al banco, e ir pagando en cómodas letras lo que a ojos de cualquier persona era una estafa. Decidí echarme un rato, a ver si cuando despertara, lo veía con algo mas de claridad.
    
    Me desperté sobresaltada, porque había llegado un mensaje a mi teléfono.
    
    Era mi vecina, que no sé dónde había sacado mi móvil. Supongo que su sobrina se lo habría facilitada.
    
    “He recapacitado, e igual podemos llegar a algún tipo de acuerdo. Pero de un modo u otro vas a pagar el daño que me has hecho pásate por mi casa, y charlamos.”.
    
    Breve y conciso. No se que clase de acuerdo tenia en mente la vieja mentirosa, pero si había algo que pudiera arreglar este lio, había que intentarlo.
    
    Así que volví a su casa, y esta vez con malos modos me mando pasar.
    
    -Por lo que me ha parecido entender antes, estas dispuesto a arreglar el desastre que hiciste, y así evitar ir a juicio
    
    -Claro señora. Ya le he dicho que los 3.000 euros que pide su abogado no los tengo.
    
    -Bien, eso me gusta.
    
    -En que estaba pensando. Que la pinte la casa, se la limpie...no se. Se hacer muchas cosas.
    
    -Estoy barajando varias opciones para meter en vereda a un joven como tú.
    
    Aquello estaba tomando un giro inesperado. Pero que tramaba esta señora.
    
    -Los hombres toda la vida, me ha usado por mi dinero. Y me han usado para sus más lujuriosos y puercos deseos. Ahora, que tengo la sartén por el mango, me voy a ir quitando una a una todas las espinas. De momento, vete a tu casa. Ya pensare, tu primer encargo. ¿Tenemos un trato?¿?
    
    -Pues bueno, no se donde me estoy metiendo, pero claro tenemos un trato.
    
    -Bien, bien eso me gusta. Que seas dócil. Pronto recibirás noticias mías.
    
    Sali de aquella casa horrorizado y revuelto. Que tramaba esta mujer. Con esos 64 años, parecía que todavía tenía necesidades sexuales, igual con acariciarla un poco, era suficiente…Deje dejarme llevar, si conseguía quitarme de encima este lio.
    
    Pasaron varios días, y llego el primer mensaje. Era breve y escueto.Baja te estoy esperando.
    
    Un escalofrío recorrió mi cuerpo. No sabía que hacer, así que no lo pensé y bajé. La puerta estaba entornada. Llame 2 veces, pero no escuchaba nada. Así que entre y cerré la puerta.
    
    -Doña Leo? ¿?Pregunte
    
    -Pasa estoy en el salón-Dijo de forma dominante, y seria.
    
    Cuando entre, me la encontré sentada en el sofá. Con un camisón transparente, y sin nada debajo.
    
    Tenia 2 tetas enormes, caídas y colgantes. Con una aureola muy oscura, y un pezón gordo.
    
    Así sentada, parecía una de esas esculturas de Botero, rebosantes, grandes y rechonchas. He de reconocer, que, en ese momento, algo dentro de mí se excito. Mas por la situación, que, por aquella mujerona, que pretendía hacer vete ...