1. Un amo dominante me somete


    Fecha: 15/03/2019, Categorías: Gays Autor: Qurioson, Fuente: CuentoRelatos

    ... queríamos, y empezamos a hacerlo de noche.
    
    La primera vez fui a su departamento que quedaba como dije a pocos minutos de mi casa, vivía en el último piso de un edificio modesto, llamé por el portero eléctrico y bajo el mismo a abrirme, la verdad estaba temblando de miedo en la puerta cuando abrió la puerta del ascensor un hombre regordete, no muy atractivo, con gesto adusto, sin mediar palabras me hizo pasar y subimos al ascensor que había dejado abierto.
    
    En el trayecto hacia su piso, no dijo una sola palabra, el miedo ya se estaba apoderando de mí, entramos a un pequeño y desordenado departamento de dos ambientes y balcón terraza, era verano y hacía mucho calor, atravesamos el living y me llevó al balcón terraza, que estaba totalmente a oscuras, justo enfrente cruzando la calle, había en un balcón similar un montón de gente reunida bailando y riendo, digamos que estaban distraídos y gracias a la oscuridad, ellos no podían vernos como nosotros a ellos .
    
    Marcelo que era el nombre del Amo Dominante se sentó en una silla blanca de plástico de las que mucha gente usa en los balcones.
    
    Yo me quedé parado, ya que no había otra silla y él no me hizo sentar en ningún lado, entonces me dijo...
    
    -arrodillate y sacame los zapatos.
    
    Me puse de rodillas y le obedecí sin decir nada.
    
    -ahora desprendeme el pantalón y sácalo.
    
    Quedo en calzoncillo y se le notaba una pequeña erección.
    
    -acariciame la pija por encima del calzón.
    
    Comenzó a acelerarse mi respiración y lo hice cuidadosamente, él no me había ni tocado todavía.
    
    -ahora termina de sacarme la ropa y dame placer.
    
    Vaya forma de decirme que le chupe la pija, pensé, le quité el calzón y apareció una verga no muy larga, pero si gruesa que estaba a medio endurecer, no tenía una erección plena.
    
    -Hace que se ponga dura puto de mierda.
    
    Su primer orden bien autoritaria no dejaba duda de quién era cada quién, entonces se la acaricié y pajeé con mucha delicadeza mientras también toque sus huevos, comenzó a emitir sonidos que denotaban placer y dijo...
    
    -agarra un cigarrillo del paquete que está en la mesa, encendelo y ponelo en mi boca, después parate contra la pared y desnúdate.
    
    Por supuesto obedecí sin chistar, me di cuenta que la gente de enfrente no podía vernos, y a pesar de que estaba acostumbrado a estar desnudo en público, la situación me resultó excitante, aunque no era lugar para que dos tipos tuvieran sexo, corríamos el riesgo de que algún santurrón nos denuncie si se daba cuenta, el único detalle es que alguien podía ver que encendía un cigarrillo, pero no le di importancia.
    
    Él estaba sentado a medio metro de la pared, prendí el cigarrillo, se lo puse en la boca, me puse donde me indicó y me quité toda la ropa ante su atenta mirada mientras disfrutaba su cigarro.
    
    Quedé desnudo en menos de un minuto, me miró de arriba a abajo y me ordenó...
    
    -date vuelta y mostrame el culo, maricón.
    
    Gire y le di la espalda, escuche que corrió la silla un poco acercándose, ...
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