1. Una noche de verano


    Fecha: 03/05/2019, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Mi nombre es Fernando y vivo en Valencia. Estoy felizmente casado con María. Desde hace un tiempo tengo una relación con Bea, una amiga nuestra, de nuestro grupo habitual de amigos. Surgió de la mutua atracción, casi sin buscarlo, y mantenemos algún esporádico y breve encuentro y sobre todo, un juego siempre muy picante con pruebecitas y retos cuando quedamos en grupo o para enviarnos por email o relatarnos luego.
    
    Bueno a lo que vamos… Yo tengo 34 años, igual que mi mujer y Bea tiene 30. Todos nuestros amigos rondamos esas edades y todos estamos casados.
    
    Durante este verano, mes de agosto, calor sofocante jejeje, ocurrió esto:
    
    Habiamos quedado para cenar en Pizza Roma. David y Bea, María y yo, Jose y Amparo, Ricardo y Yolanda, Pepi y Juan… vamos, un buen grupito. A través de nuestros emails, Bea y yo, habíamos quedado en que ambos iríamos sin braguitas ni calzoncillos, por lo que estaba deseando ver que minifalda se había puesto esa noche.
    
    En casa, vistiendome para salir, no pude evitar que María se diera cuenta que no me ponía calzocillos.
    
    -Eres un guarro!,ya vas sueltecito como a ti te gusta!- Me dice.
    
    Ignoro su comentario y me subo los vaqueros. –Pues si, me apetece recien duchadito ir sin nada, que hace mucho calor y además, sabes que me gusta y con lo guapa que seguro que te pones, me pone todavía mas caliente-. Me acerco y le doy un largo beso, cálido y húmedo al que María responde, notandola mas caliente de lo que esperaba.
    
    -Vaaaaaale… te voy a dar un gustito esta noche. Ire sin braguitas y con vestidito-
    
    Uffffffffffff, como se ponía la noche. Bea y mi mujer sin bragas!!!! Madre mia!!! Creo que esta noche me corro antes del postre jejeje.
    
    Cuando llegamos a restaurante veo aparecer aparecer a Bea con un escote pronunciado que deja apreciar parte de tus preciosas tetas y una superminifalda, que solo al mirarla, empiezo a tener problemas para disimular el bulto de mi entrepierna. Al darle dos besos consigo susurrarte al oido lo guapa que está y que María tampoco lleva bragas. Bea me mira sorprendida y sonriendo. Seguro que imaginando lo caliente que ya voy.
    
    Nos sentamos en la mesa que teniamos reservada. Bea y yo conseguimos sentarnos uno enfrente del otro. Maria a mi derecha y David, su marido, a su izquierda, rodeados de todos los demás. Comenzamos a beber y a cenar, no dejamos de mirarnos complices de lo que sabemos que está pasando. De vez en cuando dejo caer mi mano sobre las piernas de María y Bea se ries cada vez que ve dar un saltito a María sabiendo lo que hecho. No me atrevo a tocar a Bea por debajo de la mesa, pero ya he acariciado un par de veces la rajita de mi mujer y estaba muy humeda. No aguanto mas, estoy muy caliente. Dejo caer mi tenedor al suelo para tener la escusa de agacharme y cuando lo hago, Bea abre levemente sus piernas para que puede verte mejor. Aunque casi no hace ni falta, porque, sentada, la minifalda casi no le tapa nada.
    
    De pronto María dice que va al baño, Bea se da cuenta y ...
«1234...10»