1. Recuerdos de hermanos 1


    Fecha: 30/04/2019, Categorías: Incesto Intercambios Lesbianas Autor: Edwardo2, Fuente: SexoSinTabues30

    ... dejaba insatisfecha. Yo le contaba a mi hermano con lujo de detalles todo lo que hacíamos, él también fue el confidente íntimo de cuáles eran mis puntos más vulnerables, uno es la palma de mis manos cuando me la besan, o cuando lamen la punta de mis dedos, otro son mis pezones porque cuando me los besan siento que me transportan a las nubes, al igual que si tocan mi clítoris o besan los labios de mi vagina y meten su lengua para acariciar mi clítoris. Mi hermano sabía que yo era muy caliente y cómo ya era maestra le platicaba y le tenía mucha confianza para contarle que una vez había hecho un trabajo sobre el incesto y le explicaba que no era nada del otro mundo pero que para muchas personas era malo porque era como si él y yo tuviéramos sexo, siendo hermanos y lo anunciáramos al mundo, nuestra sociedad no lo iba a aceptar.
    
    Como maestra que era de español en una escuela particular en una Colonia de buen nivel económico, teníamos las maestras un saloncito para fumar y tomar café a la hora del recreo de los niños. En ocasiones mi hermano iba por mí a esa hora y yo se los presentaba a mis compañeras, una era Olga que era la asistente de la Directora y Juanita también maestra con quienes me sentía muy bien y compartíamos muchas pláticas y sin que se dieran cuenta yo le guiñaba un ojo a mi hermano y le coqueteaba como si fuera su novia, hecho que aún no era para nosotros algo cierto, sino fue hasta poco tiempo después cuando ya presumía para mis adentros la calidad de sentirme su mujer.
    
    Vivíamos en la Colonia San Alvaro al norte de la Ciudad de México por aquel entonces. Aún recuerdo que mi hermano y yo compartíamos la misma recámara, aunque ambos dormíamos en camas individuales separadas por un buró, la que me tocaba a mí estaba junto a un closet hecho de madera de encino pero más bien era de madera de fresno, muy buen closet por cierto. Al abrirlo contaba con un espacio amplio para colgar mis vestidos y tres cajones amplios donde guardaba mi ropa íntima. Por debajo de la cajonera había un espacio en el que guardaba mi diario íntimo y más adelante guardaría varios papelitos de amor que me escribía mi hermano a escondidas de nuestros progenitores que me ponía por debajo de mi almohada y algunas revistas porno muy ilustrativas con fotografías de mujeres haciendo el amor con hombres y otras de mujeres haciendo el amor con otras mujeres las cuales me atraían mucho y otras más, ilustradas con fotografías y diálogos y más delante también guardaría ciertos ensayos de novelas de incesto de las cuales yo escribía los diálogos, en los que él y yo éramos los principales protagonistas con los argumentos que tanto él como yo hacíamos.
    
    Frente a mi cama tenía un ropero color beige con dos espejos grandes en los que podíamos ver nuestras imágenes cuando ambos estábamos en mi cama discutiendo los diálogos de nuestras novelas, los cuales también realizábamos en un escritorio chico a un lado de la cama de mi hermano dónde también hacía mis reportes de la ...
«1234...7»