1. Dulce espera con mi Lyon, Final.


    Fecha: 07/06/2020, Categorías: Zoofilia Autor: Juan Alberto, Fuente: SexoSinTabues30

    ... tenido, gentilmente se ofreció de ayudarla y se trajo la rusa a la casa, ella dijo que estaba buscando una granja que alquilaba mascotas y nosotros le aseguramos que estaba en el lugar justo, nos pidió si teníamos algún Golden, mintiendo yo le dije que teníamos un magnifico ejemplar de mastín napolitano, un perro gigante y si necesitaba ayuda yo misma en persona la asistiría, la rusa intento rehusar, pero nuestra insistencia fue tal, que al final resignándose y seguramente para no hacernos sospechar, la rusa accedió a alquilar a Brutus, nuestro mastín.
    
    La rusa en sí era muy linda, la encontré en su cabaña y yo llevaba a Brutus con la correa, ella cuando lo vio se atemorizó, pero yo le dije que no tenía nada que temer porque Brutus no era nada más que un bebe de apenas dos años y meses y que ella sería la afortunada para tomar su virginidad, porque era su primera perrita, a ella se le abrieron los ojos con una cierta avidez, le dije que se desvistiera y que, si no le parecía a mal, yo también me desnudaría, ella estuvo de acuerdo y en minutos estábamos las dos desnudas.
    
    Debo admitir que era una mujer muy bella, de unos treinta y tantos años, sus cabellos rubio platino, un vientre plano, unas caderasmaterinscoy (maternales), sus senos también eran grandes y maternos, la hice arrodillar ante una mesita de centro y acomodó sus rodillas sobre un choapino, le dije que abriera bien sus rodillas y levantara su culito albino, ella siguió todas mis instrucciones y se encomendó a mi experiencia, ya verás lo que tenemos para ti, rucia espiona, pensaba, mientras masturbaba a Brutus y sobajeaba la punta de su verga en los rubios pendejos de ella, extraje el lubricante de la bolsa que pendía de mi cuello y espalmé abundante líquido acuoso en su estrecho ano y en su chocho.
    
    Luego sin decir agua va, apunté la gruesa verga a su ano y Brutus apena sintió la estrechez de su culo empujo con toda su fuerza, sus zampas la mantuvieron casi inmóvil porque ella lucho por unos instantes por zafarse, pero la brutal fuerza de Brutus se lo impidió, jejeje, dio un alarido cuando el perro empujó una bola como una naranja dentro del culo de ella, extendí una toalla en la mesita y ella escondió sus ojos en llanto ― si esta rucia es de la KGB estará preparada para cualquier cosa― pensé sonriendo para mis adentros, la teníamos enculada y bien enculada.
    
    Sus sollozos se trasmutaron en quejidos y gemidos, muy luego se relajó y comenzó a gozar de esa tremenda verga ensartada en su culo, sus manos acariciaron mis muslos y cuando me senté a horcajadas en la mesita y le ofrecí mi chocho, ella con una lengua fina y rosadita no perdió tiempo y comenzó a lamer mi chuchita, Brutus la follaba con destreza y furia, ella lanzaba chillidos de tanto en tanto y movía su culito hacia atrás.
    
    Al cabo de una decena de minutos, Brutus se detuvo para bombear su semen en el culo de la rucia, yo había logrado un orgasmo viendo como su estrecho culo se extendía bajo los embates del perro, y ...
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