1. Cogiendo con mi profesor de la UAEM Texcoco


    Fecha: 23/04/2019, Categorías: Hetero Autor: traviesoedwin, Fuente: SexoSinTabues30

    ... aun soy una niña!
    
    – Lo se amor… Por eso mismo, te has portado demasiado mal…
    
    Me encantó que dijera eso, pero seguía dándome esas brutales embestidas, no aguantaba el dolor que me tiré completa a la cama, creyendo que ya no me haría más nada y mi sorpresa fue que aun ahí me seguía follando el culo, tomaba mis nalgas como apoyo y las apretaba esperando que mi culo apretara más. Comencé como a querer llorar pues realmente me dolía. Tomó el dildo y lo saco.
    
    – Tranquila amor, ya vamos a acabar…. Mmmm… Que delicioso, dejaste bañado de tus jugos el dildo.
    
    Yo sólo gemía, no podía ni responder. Se paró junto a la cama y me dijo:
    
    – Ven perrita, quiero que acabes con esto en tu cara…
    
    Me quedé tirada en la cama, no podía moverme, había tenido un orgasmo que aún no se pasaba…
    
    -Te dije que vinieras perra.
    
    Me dio una fuerte nalgada e hice caso, estaba muy dolida, sentía mi ano palpitar después de la cogida que me dio, doblé mis piernas para agacharme en posición de cuclillas y empezar a mamar, mi culo quedaba abierto en esa posición, sentía lo húmedo que había quedado mi culo de tanta embestida que me dio.
    
    -Bájate el Bra, quiero ver esas nenas que no me has enseñado hoy…
    
    Me lo bajé y como loco fue a agarrarlas y me pellizcaba fuertemente los pezones.
    
    – ¿Eres mi perrita o mi putita?
    
    Yo aun mamando me pellizcó fuerte gritándome que contestara.
    
    – Las dos papi, tu puta y tu perrita.
    
    – Mmmm…. Así me gusta… Ahora pon la cara, que ya voy a venirme.
    
    Le di unas últimas mamadas, desde los testículos hasta su glande y me preparé. Comenzó a masturbarse y se vino en mi cara, muy espesa me cayó en ojos y cara, una cuanta me cayó en los pechos. Yo sólo le sonreí cómo niña buena, no sé porque pero me gustó. Le seguí mamando, exprimiendo ese gordo pene mientras acariciaba mi clítoris. Tomo su pene y lo embarró del semen que tenía en mi cara y dijo:
    
    – Pon el culo que quiero embarrarlo.
    
    Yo creía que me la metería nuevamente, ya no quería. Me puse de perrito y así fue, sólo limpio su pene en mi ano. 
«12...6789»