1. De cuernos y cornudos. Infidelidades de chicas.


    Fecha: 21/04/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Clara, Fuente: TodoRelatos

    ... mismo se estaba tocando el culito)
    
    B-¡Córrete Lara! Quiero que me des con el strap
    
    L-Sigue Bruno, ya me viene. Me voy a correr en tu boquita de putita y luego te follaré, te reventaré tu culito de furcia. Síii, me corro, que gusto cabrón.
    
    Estaba muerta. Mi novio tenía la cara empapada de mis jugos. Me besó en la boca, guarreándome toda y me preguntó si quería follarlo. Os imagináis mi respuesta, ¿no? Él mismo corrió hasta el armario, rebusco en la mochila y me lo trajo. Con mucho amor, me colocó la braguita con aquello colgando, jajaja. Me pasó la lengua por la parte interna de los muslos, cosa que sabe que me excita y me entregó el bote del lubricante. No lo dudé. Mientras él se tumbaba boca arriba en la cama, unté el dildo y su agujerito. Me coloqué en posición.
    
    L-¡Alza las piernas, nenaza!
    
    B-Lo que tú mandes, Ama Lara.
    
    L-Así me gusta putita, que sepas quien manda aquí, perra. Voy a dejarte el culo bien abierto, por zorra.
    
    B-Con cuidado Ama. Me duele un poco.
    
    L-¡Menéate la polla, ¡esclava!
    
    B-Menéamela tú, ¡zorra!.
    
    L-¡Zasca! (azote en todo el culo). Aquí, tú eres la puta. Dame esa mierda de rabo duro que tienes.
    
    B-Lara, Lara, deja de estrujarme las bolas, por favor. Me corro
    
    L-Pídelo bien, ¡nenita!
    
    B-Una mierda, ¡zorra! estrújame las pelotas, verás que corridón te voy a dar. No quiero aguantar. Tómala toda, te baño.
    
    L-¡Cabrón! Como te gusta que te dé por el culo. ¡Mariconazo!
    
    B-Lara, me he corrido muy a gusto. Hacía días que no me sacabas tanta leche, zorrita (recuperando un buen grumote de su pecho y restregándomelo por los labios, antes de besarme), pero no me llames maricón, por favor.
    
    L-No sé qué voy a hacer contigo, Bruno. Ni sin ti, (volviendo a besarle). ¿me das un poquito cariño? Tengo ganas de correrme otra vez.
    
    B-Yo también Lara, pero creo que he bebido demasiado esta noche. Tengo la boca seca. ¿Quieres un poco de agua?
    
    L-¡Bruno! Jajaja. La última vez que dijiste e hiciste eso aquí, se lió parda, ¿te acuerdas?
    
    B-¡Es verdad, Larita! Pero hoy no pasará, jajaja.
    
    Efectivamente. No pasó. Bruno volvió con el agua. Volvimos a follar o, mejor dicho, a hacer el amor, de forma pausada y tranquilita. Conmigo encima y cabalgándole de forma suave hasta que me corrí a base de frotarme con su pubis y luego él se volvió a vaciar en mi coñito, aunque esta vez con mucha menos cantidad de esperma. Me levanté, fui al armario y cogí unas braguitas para no manchar. Nos metimos en la cama y apoyé mi cabeza en su pecho.
    
    L-¡Bruno! Quiero que te folles a Ali.
    
    B-¡Lara! Ya lo hablaremos. Acabamos de tener un bonito rato juntos. No me apetece pensar en nada ni en nadie más. ¡Te quiero, cariño! Tú me das todo lo que necesito y deseo. Quiero hacerte feliz y si te hace feliz que lo hagamos con Ali, lo haremos. No te preocupes.
    
    L-Ese es mi niño.
    
    De repente, se abrió la puerta y un cabezón apareció por allí. Mi puñetera cuñadita.
    
    Y(Yolanda)-Ya está bien, cabrones. Lleváis tres horas follando. ...