1. YO 28, OTROS DOS CHICOS MUY JOVENES. (9)


    Fecha: 11/04/2019, Categorías: Gays Autor: Pinkys, Fuente: SexoSinTabues30

    ... así cada vez que se podía.
    
    Y así seguían nuestras vidas hasta que una tarde, se agregó a nuestro grupo Álvaro, el hijo de la secretaria, a la fecha tenía 13 años, era un chico menudo, de tez muy blanca (Joel más moreno) y mucho más introvertido, que se notaba le incomodaba la relación de su madre, pero debía guardar silencio.
    
    Una tarde de sábado, estando en casa tomando una cerveza, alguien toca a mi puerta, y al salir, oh sorpresa, era Álvaro, aquel chico de 13 años hijo de la secretaria. Prontamente lo invité a pasar.
    
    Le pregunté si quería beber cerveza, y asintió, lo que, si bien me sorprendió, no lo di a conocer, y así pues empezamos a beber mientras conversábamos de cosas banales.
    
    En algún momento me fijo en sus piernas, descubiertas dado que vestía pantalones cortos, las que tenían una abundante vellosidad, fina de color claro, casi rubia. Instintivamente llevé mi mano y acaricié dichos vellos, y sin aviso subí mi mano sobre la rodilla (él tenía su pierna cruzada sobre la otra, por ello se me hizo fácil tocarla) y le comenté, “vaya que peludito” y él me respondió, “ni te imaginas como es más arriba”.
    
    Más claro echarle agua, me dije yo ante dicha invitación, así que llevé mi mano a su entrepierna y pude tocar un bulto de buen tamaño, más aun pensando en su edad.
    
    Empecé a desabotonar su pantalón y le pedí se pusiera de pie, y quedó justo en frente mío. Solté todos sus botones y su pantalón se fue al suelo, yo bajé su ropa interior y pude ver un hermoso pene blanco, que nacía de un montón de pelos casi rubios como los de sus piernas, con unos huevos también cubiertos de pelos. Inmediatamente metí en mi boca su hermosa verga arrancando un gemido, junto a ello empecé a acariciar sus huevos iniciando una paja bucal, metiendo y sacando hasta mi garganta. Con mis manos le agarraba el culo y lo atraía hacia mí, hasta casi ahogarme, mientras sentía en mi boca como se miembro se engrosaba cada vez más.
    
    Luego de algunos minutos, le invité ir al dormitorio, donde nos desnudamos rápidamente, se acostó en mi cama y empecé a acariciarle y lamer su cuerpo. Solo tenía vello corporal desde la cintura hacia abajo, nada en su tórax y muy pocos vellos en sus axilas, lo que me invitaba a lamerle y chuparle sin descuidar su pene que estaba a mil, todo ello entre sus gemidos que trataba de evitar.
    
    Luego de unos instantes, le pedí “métemelo” y me puse boca abajo, como otras veces ubicando una almohada en mi bajo vientre, para dejar el culo elevado. Él se ubicó entre mis piernas y puso su pene ardiente en la entrada de mi ano, empujando e introduciéndolo de un solo golpe, lo que noté al sentir sus huevos chocar en mis nalgas.
    
    Inició un movimiento de meter sacar muy delicioso. Mi culo resintió la violencia de la penetración, pero me la aguanté, junto con el efecto del alcohol ingerido se hizo más tolerable. Su penetración era intensa y muy placentera, más que en mi mente me solazaba sabiendo que era un chico de 13 años, que no sé si tenía ...