1. Desvirgando a un casado (Parte 1)


    Fecha: 04/04/2019, Categorías: Gays Autor: Hombrecaliente, Fuente: CuentoRelatos

    ... ascensores, me dice despacito: "vení". Lo sigo y nos subimos al ascensor, me cuenta que tiene la llave de un baño del personal que está en el piso de arriba, al que solo entran ellos pidiendo la llave y podemos estar solos un rato. Yo, en total silencio, asintiendo con una sonrisa pero sorprendido.
    
    Entramos en el baño, no pasaba nadie por el pasillo del tercer piso. Cerró la puerta con llave nuevamente y, comprendiendo los dos la situación, nos abrazamos y besamos apasionadamente. Aflojé el nudo de su corbata y desabroche su camisa, mientras no dejábamos de franelearnos. El me decia que hacía rato quería tenerme: "¡No sabes lo caliente que estoy con vos pendejo! Quiero probar pero quiero que sea con vos..." Nos fuimos a un privado, colgó su camisa en la puerta y dejó sus pantalones hasta los tobillos. Lo bese, comiendo sus labios de uno por vez, fui bajando por su pecho peludo, succioné sus tetillas.
    
    Gemía: "¡Qué rico papi, como me gusta....!" - "Esto sé que también te gusta y yo voy a hacerlo mejor que nadie..." Me arrodillé y comencé a chupar su pija. Que hermosa verga entrando y saliendo de mi boca, recorrida por mi lengua. Le daba besos en la cabeza de su chota y lo miraba a los ojos. Era hermoso verlo gozar así, tantas veces me lo había imaginado. Me la metía toda en la boca y apretaba fuerte sus piernas y acariciaba su vientre, se sentía muy rico tener su cuerpo de esa forma. Se agacho para decirme al oído: "Nunca me la chuparon así, tenías razón está muy bueno..." (Pensé, tiene una verga muy rica, su mujer no sabe lo que se pierde)
    
    Me acarició las mejillas y me indicó que me pusiera de pie, nos besamos otra vez y, en un movimiento, me dio vuelta poniendo mi cara contra una de las paredes del privado que eran de mármol muy frío. Terminó de bajar mis pantalones y mi bóxer, acarició mi culo, abriendo mis nalgas con fuerza y frotando su mano grande a lo largo de mi raya. Se acercó y sentí su pija apoyada en mi culo. Le pregunte si se animaba, asintió con la cabeza y un suspiro. Me agache para sacar un forro del bolsillo de mi pantalón y se lo dí. Instantes después, sentí el glande su pija haciendo fuerza en mi orto. Le tomé la pija con mi mano y lo ubique. Salivó en su mano y me la pasó por el orto para lubricarme más, también lo hizo sobre su garcha y fue metiéndola suavemente. Comenzó a cogerme despacito pero, al rato, de un envión la mando toda y yo gemí de placer y un poquito de dolor. Siguió moviéndose con su fuerza de macho y poniendo mi cara contra la fría pared. Me mordía los labios, gozaba mucho pero quería que él lo hiciera más en su primera vez y conmigo. Por eso, le pedí darnos vuelta, de manera de quedar apoyado con mis manos en la mochila del inodoro para inclinarme un poco, porque derechitos estaba riquísimo, pero quería ofrecerle todo mi orto y que tuviera espacio para moverse y pegarme una rica culeada. En esa posición comenzó a bombear con más ritmo y fuerza.
    
    Me dijo: "Así está muy bueno. Que rico orto que ...