1. Solo mirar, no tocar


    Fecha: 15/11/2019, Categorías: Incesto Autor: Lara, Fuente: CuentoRelatos

    ... hacía tiempo que no hablábamos y estaba deseoso de saber de mí, que tal en ese nuevo trabajo que me tenía absorbida casi todo el tiempo, cotilleos de amoríos tanto de mí como de mis hermanas, Óscar era genial, era un chico muy abierto, simpático y divertido con el que se podía hablar de cualquier tema sin tabú.
    
    Después de más de dos horas sin parar de hablar de mí, de mi familia, de él, me levanté para ir al servicio, cuando entre nuevamente en la habitación estaba leyendo en silencio, solo se oía la lluvia golpear los cristales de las ventanas y el bramar del viento, mi primo estaba con la misma postura que le encontré al entrar la primera vez, con una camiseta de AC/DC y unos pantalones cortos de deporte, estaba tan embebido en su libro que no quise molestar así que me recosté otra vez enfrente de él y me puse a leer yo también.
    
    Al poco de estar los dos en silencio, notaba como su mirada en ocasiones se dirigía a mí y estaba un rato observándome, hasta que levantaba mis ojos y le preguntaba sonriéndole con un simple ¡Que! a lo que él contestaba ¡nada, nada! y volvía a posar sus ojos en el libro.
    
    -¿Pero qué pasa?, que miras Óscar, me pones nerviosa. –Le pregunté riendo cuando una vez más se quedaba mirándome.
    
    -Nada prima, que no me había fijado hasta hora en lo guapa que estas. –Me contestaba guiñándome un ojo.
    
    -Anda, anda que eres un zalamero.
    
    -No en serio y perdona si te molesta lo que te voy a decir, pero cuando llegue estabas entrando en el baño y tu madre abrió la puerta para despedirse de ti y sin querer te vi como te quitabas el albornoz y como quedándote desnuda te metías en la bañera, solo te vi de espaldas de verdad, pero fue suficiente para que si no fueras mi prima me hubiera enamorado de ti al momento.
    
    Me quede en blanco, sin saber que decir, estaba sonrojándome por momentos, no sé si un poco molesta pero si muy alagada.
    
    -Y ahora al verte aquí frente a mí pues lo siento, creo que eres una mujer realmente preciosa y pienso en la suerte que tendrá aquel que caiga en tus redes.
    
    -Joder primo, anda calla que me estás poniendo tierna ja, ja, ja, anda calla y dime ¿qué lees?, léeme algo como cuando éramos nanos.
    
    Fue lo único que se me ocurrió para zanjas el tema, pero en vez de eso lo empeore aunque para mejor, parece una incongruencia pero así fue.
    
    Óscar empezó su lectura en voz alta, me sorprendió lo que estaba leyendo, era una historia de amor entre una mujer casada y el que había sido hasta hace poco su alumno con escenas realmente tórridas y leídas en boca de mi primo más aun, ahora era yo quien le miraba fijamente y mi cuerpo reaccionaba con el relato imaginándome dentro de la historia, estaba sentada, recostada sobre la pared con mis rodillas sobre mi pecho hasta que una de mis piernas se estiró, mis pezones se empezaban a hinchar y a pesar de que la camiseta me estaba enorme Óscar, podía ver perfectamente como se clavaban contra la camiseta como queriendo salir.
    
    Observaba le empezaba a crecer su ...
«1234...»