1. Mi primer beso negro.


    Fecha: 12/03/2019, Categorías: Gays Autor: Danisampedro91, Fuente: SexoSinTabues30

    ... que veía como me estaba comiendo el culo y como me tenía abierto de piernas, y en aquellos momentos sentía vergüenza, era la primera vez que me hacían aquello y me sentía extraño, me sentía desprotegido y totalmente expuesto, aquello que me estaba haciendo era algo raro para mí, tal y como me tenía, estaba completamente en sus manos.
    
    Carlos, al ver como yo gemía, me retorcía de gusto tratando de cerrarme de piernas, mientras me sujetaba manteniéndome bien abierto de piernas, levantó la cabeza mirándome.
    
    ¿TE gusta? Me preguntaba.
    
    Yo que no era capaz de hablar, moví la cabeza diciéndole que sí, claro que me gustaba aquello que me hacía.
    
    ¿Nunca te dieron un beso negro? Me volvió a preguntar al ver como yo seguía gimoteando y retorciéndome de gusto.
    
    Moví la cabeza diciéndole que no, pues seguía siendo incapaz de abrir la boca para decir nada que no fuese soltar un gemido.
    
    Mientras él seguía con su comida de culo, con uno de sus dedos, empezó a tratar de que mi agujerito se abriera, intentando introducirme su lengua por él. Yo que sentía como su dedo abría mi esfínter, notaba su lengua hurgar tratando de introducirse.
    
    Dios que gusto estaba sintiendo, ya mi polla empezaba a soltar pequeñas gotas de semen, empezando a pringarme toda la polla y vientre.
    
    ¡Fóllame! ¡fóllame! Le pedía yo. Ya no aguantaba más, quería sentir su polla taladrándome el culo. Necesitaba su polla dentro de mí, necesitaba que me hiciese suyo, quería que me metiese la polla por el culo de una vez, ya no daba aguantado más.
    
    Viendo lo desesperado que estaba, dejó de comerme el culito, se incorporó para que su polla quedase a la altura de mi culo, llevó la punta de su verga a la entrada de mi agujero, y así como me tenía, sujetándome ahora por las caderas, impulsó su pelvis, introduciéndome la polla por el culo.
    
    ¡Ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh! Gemí a la vez que trataba de abrazarme a él. Dios que tremendo gustazo me había dado cuando noté su polla entrando por mi culo.
    
    Escuché como jadeaba viendo como su polla se había introducido por mi ardiente culo, como sujetándome con sus manos por las caderas tiraba de mi hacia él y como impulsaba su pubis, tratando de que su polla me entrase bien profunda. Quería que la sintiera en mis entrañas.
    
    Y claro que la sentía, veía como jadeaba y gruñía empezando con el mete y saca, pudiéndose escuchar:
    
    Plas, plas plas plas plas, plas, plas plas plas plas, del golpeteo que daba su pelvis al golpear mi culito una y otra vez, mientras su polla entraba y salía por mi caliente culo.
    
    El auto se movía como si estuviéramos saltando en él, cualquiera que pasara por allí, no hacía falta que nos vieran, ya sabían que allí había alguien follando, aquello era muy evidente.
    
    Los cristales estaban totalmente empañados, nada se podía ver, la temperatura era como si estuviéramos en una sauna, y allí seguía follándome. Yo no podía dejar de gimotear, que follada me estaba dando el cabroncete. Y él no dejaba de gruñir moviendo sus ...