Familia Corrupción y Sexo 37 - Relatos Eróticos

Familia Corrupción y Sexo 37

... hasta Jenny le pondría sus tetas en los labios a Jane invitándole a devorarlos, como si fuera una bebita nuevamente, mientras la embestían con cierta brusquedad, pero todo quedaba ahogado entre esos pechos, aunque también la pobre nena se convertía en el juguete sexual de esos 3, pues una le hacía chupar chichis, mientras que otro la empalaba, y la ultima le comía las tetas, al tiempo le dejaba tocarle su cuevita, y eso no acababa. Unas manos listas se iban acercaban a sus nalgas, comenzando a darle masajes sensuales, sobando esas carnes con ansiedad, gozando de la suavidad de esa tersa piel, pero también el morbo de lo prohibido, más pronto eso acababa, dando paso a algo mucho más intenso, un dedo se le introducían en el carnoso culo, dándole una sensación sorpresa, acabando por sentir placer por cada punto erótico. Sus labios tenían tetas, sus chichis eran saboreadas y masajeadas, su vulva penetrada con una fuerza inesperada, su culo ahora masajeado por dentro, era un desenfreno de lujuria que hacia estallar sus sentidos en un clímax sexual que sobre-estimulaba su mente, haciéndola empezar súbitamente a correrse, pero no solo una vez, sino que tendría varios orgasmos consecutivos, haciéndola gemir más fuerte, callada por los pechos, aunque sus sentidos estaban ahogados por tanto erotismo, llenándose el ambiente del aroma del sexo puro, y sus ojos estaban llenos de vistas libidinosas, pronto llegaría a un orgasmo más fuerte, empapando con la verga Dany la vulva de su hermanita, quien se correría con fuerza, escurriendo entre sus muslos una buena cantidad de leche, que la traviesa Jade recogería para dársela de comer en un poco de pizza, que aunque fría la probaría sin dudar, pero en eso sonaría una alarma.

Maldición, mis compañeras podrían llegar en cualquier momento – decía Jenny viendo la hora.

Yo quiero mas – apenas diría temblorosa Jane.

Tranquila primita, solo cambiaremos de locación, vamos al cuarto, ahí nos encerramos y a gozar – decía traviesa Jade.

Sacándole la verga Dany, este le cargo entre sus brazos para irse al cuarto, donde continuarían, si una vez en la cama este se acostó para empalarla una vez más, cuando Jenny se pondría atrás con un consolador que también le daría placer y comenzaría a penetrarle el culo.

Jenny con cuidado, duele un poco – decía Jane al sentir eso.

Chiquita, ya me recuerdas, pero de esta no te salvas, que ese culito será mío – decía Jenny contenta para darle gusto por detrás.

Después de eso Jade intentaría ver si la recordaba, pero no era el caso, siendo la escusa perfecta para continuar, así comenzarían una vez más dejando a Jade frente a Jane, recibiendo una intensa penetración doble, haciendo su cuerpo vibrar con un ritmo sensual que alcanzaba cada célula de su cuerpo, mientras se besaban las primas, aunque a la rubiecita, se vería traviesa dejándole su conchita cerca a Dany para que la probara un poco, iniciando un encuentro de pasión extrema, permitiendo entre vistas toda serie de ...