1. Rompiendo la monotonia


    Fecha: 01/04/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: marori69, Fuente: RelatosEróticos

    ... comento:
    
    Nunca pensé que íbamos a usar “la maleta” así, este fin de semana.
    
    Mirando a Silvia
    
    Lucia una esplendida erección y Vanesa se estremeció un poco al oír la voz de su hermano
    
    Silvia cogió un látigo de varias colas, y comenzó a azotar el culo de Vanesa, primero suavemente, y aplicando poco a poco más fuerza en los golpes, mientras decía:
    
    Nos ha salido putilla la cuñada, habrá que darle lo suyo,jajaja
    
    El culo de Vanesa lucia rojo ya por lo azotes recibidos
    
    Vi un pequeño mando a distancia en la mesilla, me acerque y lo cogí. Sin decir nada oprimí uno de los botones, y un ligero zumbido salió de la entrepierna de mi mujer, a la vez que esta se empezaba
    
    a retorcer y jadear. Estaba claro que tenía un vibrador en su vagina. Volví a darle y el zumbido aumento de intensidad, así como los contoneos y jadeos. Había otro botón, que presione, y Vanesa lanzo un pequeño grito, ahogado por la mordaza, mientras su cuerpo se tensaba y Silvia se reía.
    
    Parece que tu marido encontró el botón de las descargas,jajaja,
    
    dijo
    
    Inmediatamente volví a darle, manteniendo más tiempo pulsado el botón. El cuerpo arqueado y tenso de Vanesa, empezaba a sudar, por la tensión de las descargas y la excitación que se apoderaba de ella. Solté el botón y oprimí varias veces el de la vibración, y entre convulsiones y jadeos, se corrió por primera vez esa noche.
    
    Le dimos la vuelta en la cama, y vi que unas pinzas metálicas, unidas entre sí por una fina cadena metálica, habían estado castigando sus pezones todo ese tiempo. Manuel le quito una de ellas y atrapo el pezón con sus dientes, apretando y chupando, y obteniendo la respuesta esperada en su hermana. De nuevo jadeos y contoneos, y un incesante hilo de saliva caía por la comisura de la boca y la bola de la mordaza. Silvia hizo lo mismo con su otro pezón y yo le saque el vibrador aun zumbando, que era de un tamaño considerable. Vi por primera vez también que su perfilado y arreglado monte de Venus, había desapararecido y lucia completamente depilada. Lamí su vagina e introduje un par de dedos dentro, mientras succionaba con fuerza su hinchado clítoris. Creo que estaba a punto de correrse de nuevo, por lo que pare un poco el ritmo y le di un par de descargas nuevas en el culo, para que le bajase la excitación.
    
    Mis cuñados estaban afanados en sus tetas, mordiendo con fuerza sus pezones, amasándolas y retorciéndolas, pellizcando y poniendo de vez en cuando las pinzas y tirando con fuerza de la cadena, tanto, que parecía por momentos que se los iban a arrancar. Vanesa estaba como ida, entre el placer y el dolor.
    
    Yo no podía mas, por lo que me tumbe sobre ella y la penetre de golpe, no fue difícil, pues estaba empapada, y comencé a follarla como si no hubiera un mañana. Silvia le quito la mordaza y puso su coño sobre su boca, para que se lo comiera, mientras Manuel se situaba también sobre su cara y comenzaba a follarse a su mujer. Me corrí en poco tiempo, pues la excitación era máxima, ...
«12...567...14»