1. La Sangre Llama


    Fecha: 13/10/2019, Categorías: Incesto Autor: Axayacatl, Fuente: SexoSinTabues30

    ... para saber si podía ir a su casa, después de darnos algunas recomendaciones dijo que saldría por un tiempo.
    
    Mamá iba de salida y la seguí hasta la puerta para asegurarme cuando se fuera. Estábamos solos en casa.
    
    Le pedí a Mar que me diera una mamada como lo hacía mamá a papá, y yo le daría también una a ella, pusimos una toalla en la sombra a un lado de la alberca, me acomode, baje mi traje de baño y ella se hinco a un lado, tomo mi pene con sus manitas y se agachó hasta poner sus labios en la punta, le tome la cabeza y la empecé a empujar para meter mi pene completo y de nuevo hacía arriba, bastó eso para que ella lo hiciera nuevamente por su cuenta, me estaba dando una mamada formal y sin jarabe, minutos después me comenzó a punzar el glande estaba teniendo un orgasmo, ella chupaba yá como si lo hubiera hecho muchísimas veces.
    
    Tocó mi turno y se acostó sobre la toalla separé sus piernas y besé un pequeño monte, jale su pequeño bikini hasta media pierna, besé nuevamente ya sin bikini, separé sus pequeños labios con mis dedos y metí la punta de mi lengua en el orificio y Mar se retorcía, seguí lamiendo ya por toda su pequeña vagina, adentro y afuera, pasaba por su clítoris y hacía un ruidito como un grito apagado.
    
    La llevé adentro y pusimos una película del canal erótico, le dije que nos quitáramos los trajes de baño porque estaban mojados, quedamos ahora sin nada de ropa, pedí a Mar que se recargara en el descansabrazos del sofá y me puse detrás de ella y flexione las rodillas para tener la altura apropiada y poder poner mi verga en su culito, cuando lo hice ella se quedó quieta sin decir nada mientras le punteaba el culo.
    
    Luego la acosté en la alfombra y subí sus piernas y le dije que las sostuviera, me acomode sobre ella y puse mi pene en la entrada de su conchita, lo quise meter en un intento pero no entro, mar se quejó un poco y me disculpé, entonces tomo mi pene con su mano y lo guío hasta que la punta pasó entre sus labios, lo deslicé está vez despacio y se metió todo, fué la experiencia más deliciosa que había sentido hasta entonces, estábamos perdiendo la virginidad ambos, comencé a moverme y Mar cerraba los ojos, empuje todo y me detuve, le dí un beso y abrió los ojos nos miramos y nos volvimos a besar, con una voz que en ese momento me sonó más tierna de lo qua sonaba siempre me dijo
    
    – ya somos esposos de verdad porque me metiste tu pene-
    
    -eso quería, que fuéramos esposos de verdad –
    
    Me besó otra vez mientras me movía nuevamente,
    
    – hazlo despacio porque me está ardiendo- me dijo.
    
    Aguante las ganas de hacerlo rápido y fuerte, para que Mar no se quejara, saqué el pene despacio hasta que solo quedó el glande dentro de mi hermanita y empuje con gentileza nuevamente hasta el fondo, repetí hasta que nos acoplamos de manera casi perfecta pues yo sentí lo apretado de su conchita en todo mi pene pero sin dificultad entraba y salía, veía la cara de Mar y ya no se notaba molestia alguna, ella tenía sus rodillas casi ...