El viaje de Iván - Relatos Eróticos

El viaje de Iván

... recibía la visita de la mano de la tía, provocandome gemidos de placer. Me azotaba la cara con la polla del equino y también le azotaba la cara a la India con el descomunal miembro.

La chica quería pasar al siguiente nivel. Nos levantamos y cogió unos bloques de paja , que colocó debajo del caballo. Puso su sari a modo de manta y le ayude a tumbarse quedando debajo de la tripa del animal. La india se llevó sus dedos a la vagina para dilatarla antes de la penetración. Cuando sintió que estaba lista, me indicó que podia hacer de mamporrero guiando la verga a su coño. Cogí el tronco del pene y lo guíe a la vagina. Tardó bastante en penetrar, pero conseguí meter todo el glande y unos cuantos centímetros. La india no paraba de gemir y de gritar de placer, menos mal que estabamos muy apartados de la feria, sino ya habría varios hindúes viendo el show. Con el mete y saca, el Marwari bufaba, el cabron estaba cachondo a más no poder. Yo lo pajeaba con lentitud me ponía más hacerlo así porque daba la sensación de que el animal se lo hacía con cariño. Después de un rato de follada vaginal, la india quería ahora un anal. Se dilató bien el ano, y de nuevo a la carga. Dirigí el pene al recto, está vez no tardo tanto en entrar, cuando sentí que había entrado suficiente polla, empeze a masturbar al equino. El anal parecía que le gustaba más al bicho porque sus bufidos eran más fuertes, quizá no tardaría mucho en venirse dentro de la chica.

Notaba que el pene empezaba a temblar en mi mano, sabía que en unos segundos el caballo terminaría, así que la agarre con más fuerza haciendo más rápida la paja. La chica gritaba estimulandose el clítoris a la vez. El Marwari sólto un potente relincho corriendose dentro de la india. La leche se caía por la raja, manchando el suelo. El pene temblaba tanto que al final se acabó saliendo del recto, y puse su punta en mi dirección, mojandome la cara se semen caliente con el último chorro. La chica suspiraba con fuerza recuperando el aliento. Me sonrió cuando me vio la cara empapada de lefa, le devolví la sonrisa, para luego sacar mi lengua y lamer el semen que tenía en los labios. Con mi mano me secaba la cara, manchando mis dedos de esperma, que luego chupaba eróticamente. Al cabo de unos minutos ayude a la chica a levantarse y quitamos lo bloques de paja de debajo del animal. Yo aún seguía cachondo y no me había corrido.

- Do you want to see how i suck his anus? - le pregunté a la chica

Me hizo un gesto con la cabeza de afirmación y nos colocamos en el trasero del animal. La india agarro la cola del equino para que me resultase más cómodo hacerlo. Acerqué mi rostro y comenze a lamer aquel sabroso ano. El Marwari se debajaba hacer, también disfrutaba de aquello. Metía toda mi lengua en el recto, dejandolo lleno de saliva. En un momento dado rugieron las tripas del bicho, lo que significaba que se iba a poner a cagar. La tía me daba palmaditas en el hombro para decirme que me apartará, pero yo quería darme una ducha de ...