1. Los Secretos de Mamá-Confesiones profesionales..


    Fecha: 06/10/2019, Categorías: Incesto Autor: Zorro Blanco, Fuente: TodoRelatos

    ... debamos seguir viniendo –dijo Unai.
    
    –Bueno eso si es un punto de partida –concluyó Valeria.
    
    Los tres habían llegado a un acuerdo y parecía que estaba ya todo claro cuando Valeria decidió hablar.
    
    –Veréis hay algo que nunca he contado a nadie y me gustaría contároslo a vosotros…
    
    “Cuando estudiaba la carrera volvía a casa cada fin de semana y salía con mis amigas del pueblo hasta que mis padres me dijeron que se iban a divorciar.
    
    Bueno no pasa nada –pensé–, esas cosas ocurren entre adultos. Así que mi rutina cambió. Un fin de semana volvía a casa de mi madre y otro lo pasaba con mi padre.
    
    De modo que vi cómo mi madre comenzó a salir con otros hombres y a llevarlos a casa, follaba de madrugada y me despertaba cada sábado y acabé odiándola por ello.
    
    En cambio mi padre me dedicaba el fin de semana. Me llevaba a algún sitio distinto y pasaba el tiempo conmigo.
    
    Eso me hizo compadecerme de él y enquistar un resentimiento creciente hacia mi madre…
    
    Entonces noté que mi padre me observaba cuando me duchaba y yo le observaba a él cuando salía de la ducha. Comencé a sentir cierta atracción sexual por él y lo notaba cuando estaba cerca, pasando el fin de semana con él.
    
    Cuando tocaba con mi madre nos llamábamos y nos contábamos qué hacíamos. Yo le contaba lo puta que se había vuelto mamá y el la disculpaba por los años de falta de entendimiento entre ellos.
    
    Era algo que no entendía pero él nunca la culpó.
    
    El caso es que una noche salimos a cenar y tomamos mucho vino. Luego me invitó a un par de copas en un bar y bailamos con parejas que me doblaban la edad.
    
    Esa noche recuerdo que estaba muy borracha cuando llegamos a casa y literalmente me tiré encima suyo y le puse mis pechos en la boca.
    
    Mi madre los chupó en un primer momento y me tocó el culo bajo la falda y yo estallé de gozo en ese momento, pero luego me rechazó.
    
    No entendía el porqué así que le supliqué y me lancé a su cinturón dispuesta a bajarle el pantalón y hacer lo que hiciera falta para que me tomara esa misma noche.
    
    Él trató de hacerme entrar en razón pero, yo era terca y conseguí sacársela y metérmela en la boca. Era la primera vez que lo hacía así que sentí arcadas al notar su sabor amargo y salado en mi boca, pero seguí chupándosela hasta que me detuvo.
    
    Luego me giró y me puse a cuatro patas para que me tomase por detrás, así me pareció que sería menos traumático que si nos mirábamos a la cara como pasa en la postura del misionero.
    
    De forma que me cogió por la cintura y sentí su gordo glande a la entrada de mi chochito. Yo no era virgen, pues había follado con un chico en la universidad en una relación de apenas un par de meses, así que lo tuvo fácil para entrar, pues estaba muy excitada.
    
    Apenas me dio unas cuantas culadas pellizcándome los pezones hasta ponérmelos duros como clavos cuando me corrí.
    
    Él siguió follándome más rato y terminamos poniéndonos, él debajo y yo cabalgándole encima. Recuerdo que movía mis caderas y le cascaba los ...