Haciendo compañía a la novia del vecino (Parte 1)
Fecha: 01/10/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: IvyLover, Fuente: TodoRelatos
... cuando salió. Puse la televisión para disimular.
- Muchísimas gracias, te debo una, ya te invitaré a algo, pero ahora tengo mucha prisa.
- N-no pasa nada, tranquila. ¿Te llevas así la ropa? -llevaba su anterior ropa en la mano sin más.
- No llevo bolso así que, da igual.
- Déjalo ahí, recógela cuando quieras, o te la llevaré yo.
- ¿En serio? Eres demasiado amable ¿Dónde?
Dejó la ropa y salió de mi casa apresurada… No tardé en cogerla, joder, hasta su olor me ponía, especialmente la entrepierna de sus leggins… Me abrí y bajé los pantalones antes de sentarme en el sofá a meneármela poco a poco, con su pantalón ante la nariz, recordando ese culo perfecto y mojado…
Cogí su top de deporte y me lo coloqué alrededor de la polla, para seguir masturbándome, pensando cómo sería su jugosa raja y en todas esas imágenes mentales que tengo de ella y ese cuerpo que me follaría hasta dejarla inconsciente. Hasta que me corrí, empapando su ropa, terminé de limpiarme y la observé unos minutos, casi orgulloso antes de echarla a la lavadora.
Pasaron un par de días y no venía a por su ropa, ya limpia, me acerqué una tarde, pero pude oír los gritos de su novio y no tenía ganas de dar explicaciones de por qué tenía su ropa a ese tipo. Esperé un par de días más y me acerqué a media tarde, llamé al timbre y me abrió ella, de nuevo con esa ajustada ropa deportiva y un top usado que le caía de un hombro y a penas cubría la parte de los pechos.
- ¡Hola, César! ¿Mi ropa? ¿La has lavado?
- Si, hacía unos días y pensé que sería mejor dártela limpia.
- Eres un sol, ¡Muchas gracias! ¿Quieres pasar? Te invitó a un café, ¡qué menos!
- No sé si… ¿Tu novio?
- No pasa nada, no está, no le molestará, pasa -me hizo entrar cerrando y me señaló una silla en el patio- déjame terminar con esto y preparo algo para los dos -se subió a una escalera, moviendo algo sobre el toldo de la entrada y se tambaleó.
- Cuidado -me levanté y sostuve la escalera.
- Perdón, estaba limpiando esto y es… una pesadilla -siguió haciendo sus tareas mientras esperaba con su trasero ante mi cara, en pocos segundos noté que empezaba a empalmarme de nuevo e intenté distraerme.
- ¿Dónde está tu chico?
- Fuera. Esta semana trabaja en Italia así que… estoy sola.
- No deberías subirte a escaleras sola.
- Bueno… suerte que has llegado tú. Ya está -empezó a bajar la escalera cuando estaba distraído y chocamos, no precisamente de la forma más normal. Conseguí apartarme, pero ya me había empalmado lo suficiente para que al bajar restregara el trasero contra mi polla.
- Perdón -me aparté y ella se giró a mirarme, callada.
- No pasa nada, gracias por ayudarme. ¿Necesitas ayuda tú?
- Emmm… no, esto bien. El café está bien -me sonrió antes de hablar.
- Lo prometido es deuda, pasa -entramos y nos dirigimos a la cocina, comenzó a preparar un par de tazas.
- Y ¿en qué trabajas? No te pregunté.
- Entrenadora personal. Trabajo en un gimnasio aquí cerca, ¿A ...