1. La película


    Fecha: 11/09/2024, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... el miembro completamente erguido y húmedo por el sabor de sus labios. Sin mediar palabra, cuando estuvo a su alcance, recuperó el cinturón que yacía sobre el sofá y le ató las manos por delante, apoyadas en su ombligo.
    
    ¿Ves? No me hace falta corbata para jugar con mi puta.
    
    Ella quiso contestar, pero no le dio tiempo, con sus dedos selló sus palabras para después, con un leve empujón, tumbarla sobre el sofá y abrirle las piernas por completo, dejando ante él por primera vez, la visión de su coño completamente húmedo y vibrante, destilando olor a placer y sexo. Sin mediar palabra, en un rápido movimiento se colocó entre sus piernas, que colgaban por encima de sus hombros clavando sus tacones en su espalda, y comenzó a lamer con frenesí sus labios resbaladizos, introduciendo primero sus lengua en su coño para probar su sabor y después pasar a un movimiento frenético con su clítoris, lo rozaba, lo apretaba con su lengua, lo chupaba con sus labios. Ella jadeaba, gemía, casi gritaba. Sus dedos comenzaron a entrar entre sus labios, acompañando los movimientos de su lengua sobre su clítoris, su espalda se arqueaba para recibir las sacudidas de placer, sus manos se agarraban a su pelo intentando escapar de la prisión de su cinturón para apretar más y más su lengua contra su clítoris. Cada vez más rápido, cada vez más intenso, cada vez más placer, y más placer, y más placer. Y no pudo más, las acometidas de su lengua contra su sexo, los dedos entrando y saliendo, el placer que chorreaba entre sus piernas, llegó a un orgasmo brutal que recorrió todo su cuerpo con un golpe eléctrico imposible de controlar, doblando su cuerpo y gritando, cerrando las piernas de golpe por la gran sacudida y apretando su cabeza contra su coño para retener hasta la última gota de aquel infinito placer. Su cuerpo se convulsionaba, su espalda se arqueaba en todas las direcciones, sus pezones explotaban de placer, su boca se abría para gritar y gemir, gritar y gemir, hasta que poco a poco, la electricidad se desvaneció, disipando en el aire una corrida brutal que la había dejado por momentos sin fuerzas, dejándose caer sobre el sofá mientras su respiración pugnaba por volver a la realidad.
    
    Pasados unos instantes, le miró fijamente, con cara de lascivia y placer, y soltando su cabeza para que él pudiera incorporarse y mirarla a los ojos mientras sus dedos recorrían suavemente sus muslos, recogiendo cada gota del deseo hecho realidad.
    
    Joder, eres un cabrón, has conseguido que me corra antes que tú - Le dijo entre los últimos gemidos y suspiros que aún salían de su boca.
    
    Bueno, permíteme que te corrija, he conseguido que te corras… por primera vez, antes o después da igual. - Contestó él aún de rodillas entre sus piernas. - Ahora nos vamos a ocupar de esta - Añadió cogiéndose con fuerza su polla dura que deseaba entrar en acción.
    
    De la mano, la ayudó a incorporarse y la guió hasta ponerse de rodillas en el sofá, dándole la espalda y regalándole la maravillosa visión ...
«12...121314...»