1. Mi primera vez o como descubrí un kink inexperado


    Fecha: 05/09/2024, Categorías: Gays Autor: relleno367, Fuente: TodoRelatos

    Mi primera vez o como descubrí un kink inexperado
    
    A los 24 años sufrí un rechazo por parte de una chica. No era el primero. Mi experiencia con las mujeres era desastrosa, siempre me rechazaban y empezaba a pensar que no iba a encontrar alguien para mi, (no me juzgueis, era joven y dramática). Estaba bastante deprimido y decidí salir unos días de mi ciudad, pensé que un viaje en soledad me vendría bien.
    
    Viajé a Madrid, un sitio donde nadie me conocía, y una idea se me empezó a meter en la cabeza, "¿y si me lio con un chico?, ¿y si chupo una polla? A lo mejor con tíos tengo más suerte que con tías". No tenía ni idea de cómo hacerlo, era tan novato que ni pensé en bajarme grindr, así que busqué en mi movil un local con cuarto oscuro en Madrid y vi que había uno a 15 minutos andando desde mi pensión.
    
    Me duché, arreglé y fui allí. Era temprano, las 9 de la noche de un día entre semana. Al girar una esquina vi el local, estaba tan nervioso que primero pasé de largo para echar un vistazo. En la puerta estaba el chico de seguridad y un par de hombres. Uno era alto, de más de 50, fumaba un cigarrillo. Del otro sólo vi su espalda.
    
    Decidí lanzarme y di media vuelta. Notaba como mi corazón me golpeaba el pecho.
    
    - "Hola", -dije al portero
    
    - "Hola, son X euros con derecho a una consumición."
    
    Pagué. Entré. El local estaba oscuro, la entrada era amplia pero estaba vacía. Avancé un poco hasta un punto en que se bifurcaba el camino. Una cortina tapaba la puerta de la izquierda y unas escaleras a la derecha bajaban hasta un lugar donde sonaba música.
    
    Un chico salío trás de las cortinas y se dirigió hacia la callé. Decidí mirar que había detrás, si era el bar bajaría hacia la música.
    
    Apareció una habitación pequeña con unas sillas y un proyector que mostraba una peli porno para un chico pelirrojo que estaba sentado y no se molestó en mirarme. Al fondo otra puerta con una cortina y oscuridad detrás. Crucé la sala y me adentré.
    
    Era imposible ver nada ahí dentro, saqué un mechero del bolsillo y avancé con cuidado. Veía bultos que suponía eran hombres, ellos también encendían sus mecheros para mirarme. Giré a la izquierda y me encontré con un chico delgado, camisa de cuadros, cabeza afeitada y barba corta. Encendimos varias veces los mecheros para echarnos un vistazo y empezamos a meternos mano y besarnos. Nos desabrochamos las camisas y nos toqueteabamos. Yo estaba ansioso y bajé una mano hasta su polla mientras sacaba la mia con la otra, pero estaba tan nervioso que tuvo que hacerlo él.
    
    Ambos nos pajeabamos mientras nos comiamos las bocas, pero yo quería sentir su polla. Se la agarré y empecé a pajearle y él hizo lo mismo con la mía, jamás había estado tan cachondo. Estuvimos un rato así hasta que él sujeto las dos con su mano y nos pajeó a los dos. Era tan nuevo que no sabía ni que se podía hacer eso, me iba a correr en nada así que le detuve y me puse de rodillas en el suelo.
    
    Se la agarré con la mano y empecé a lamerle el glande. ...
«123»