1. Atada, expuesta y dominada


    Fecha: 22/08/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Diana78, Fuente: TodoRelatos

    ... altura.
    
    -Di mi nombre, llamame- ordena.
    
    -No, no sé quién eres- trago saliva.
    
    Su mirada se vuelve dura, sus rasgos ahora mas cercanos, son bellos, fuertes, rectos. Sus ojos claros me miran con dureza.
    
    -Mi amo- respondo al fin. Le miro con esperanza y después bajo mi mirada en señal de sumisión.
    
    Se incorpora, afloja su agarre en mi nuca y responde-Eres muy desconfiada. Amo, así sea-
    
    Se incorpora, coge mi cabeza con ambas manos y ahora hace palanca con ambos dedos gordos en las comisuras de mi boca. No me queda más remedio que abrir al máximo mientras introduce su polla.
    
    -Relaja la garganta, vamos a ver cuánto eres capaz de tragar-
    
    Me concentro y trato de relajarme, busco un mejor ángulo y la cuerda que recorre mi sexo me hace gemir.
    
    Entonces empieza su follada en mi boca, entrando y saliendo sin compasión. Me llega hasta el fondo de la garganta generando arcadas que contengo a duras penas. De los ojos me saltan lágrimas. Aprovecho el vaivén para masturbarme con la cuerda que frota mi coño. Me inunda poco a poco un calor en todo mi cervix. Me corro como una loca mientras trato de no ahogarme. De mi garganta escapan gritos de placer que su verga ahoga. Pero debe notar las vibraciones. Porque la saca rápido, acerca su cara y me recrimina.
    
    -Qué ha pasado golfa? Te has corrido?-. Apoya mi cabeza en la superficie donde estoy, suelta sus manos y le oigo avanzar detrás mío.
    
    Noto como coge mis labios del coño, los separa y comprueba mi vagina con sus dedos. Me avergüenzo de mi estado, cierro los ojos y escondo la cabeza.
    
    -Si, mojadita. Pero no tenías permiso para correrte. Has sido mala. Necesitas un castigo-.
    
    Joder, fue oir la palabra castigo y una última sacudida de mi orgasmo contrajo todos mis músculos vaginales.
    
    -Si, veo claramente que tendrás que recibir más de un castigo para domarte-. El tono pícaro en su voz me confirma que ha visto los efectos del orgasmo en mi vagina en primera fila.
    
    Retira la cuerda empapada de mi entrada hacia la derecha obligándome a erguirme por la tensión, hasta que queda en la corva de la rodilla dándome otra vez el largo para reclinarme.
    
    Guardo silencio esperando …
    
    -Pero ahora no, será cuando yo lo crea oportuno-. Casi podía imaginarme una media sonrisa burlona en su cara.
    
    Se mueve, no puedo ubicarle. Elevo la cabeza en un intento de mirar alrededor cuando sus manos se apoyan en mis hombros. Sus manos son grandes, fuertes y a la vez tiernas. Ha debido echarse algún tipo de aceite ya que resbalan mientras me da un masaje desde los hombros, cuello, espalda y bajando…
    
    -Que no se diga que no cuido bien de mi putita-. Lo dice en un murmullo, un ronroneo que me envuelve.
    
    Llega a mis nalgas y las masajea en círculos, apretando, separando las mejillas de mi culo. Tantea con sus dedos mi ano pasando por toda la raja de arriba abajo y parando para presionar un poquito. Mi respiración se acelera, vuelvo a soltar jugos como una loca y me pongo muy cachonda. Jadeo fuerte y ...
«1...345...»