1. Ana emputecida


    Fecha: 27/07/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: dameroelectrico, Fuente: TodoRelatos

    1
    
    Todo empezó como una broma de mal gusto por mi parte. Me explico…
    
    Hace años que rompí con Ana, una mujer con la que tuve una relación de años, que poco a poco fue deteriorándose hasta acabar de mala manera. No os voy a contar nuestra ruptura para no aburriros, pero sí os diré que nos seguíamos viendo de vez en cuando, porque frecuentábamos los mismos bares. El caso es que, aunque ha pasado bastante tiempo, yo seguía estando bastante resentido.
    
    Un día, volviendo a mi casa, pasé por su portal y se me ocurrió mandarle un wasap para molestarla. Como estaba bastante pedo, no me lo pensé dos veces y escribí: “hola Ana, estaba pensando si sigues siendo la misma putilla”. Lo mandé antes de arrepentirme. Recibí su respuesta casi de inmediato: “muy gracioso. pues seguro que follo más que tú”. A lo que contesté también, casi sin pensarlo: “pues podríamos echar un polvo. pagándote, desde luego. ya no somos amigos”. Para mi sorpresa, su respuesta fue: “eso puede hablarse”.
    
    2
    
    Ante semejante proposición por su parte, había que pensarlo detenidamente, para no acabar discutiendo como siempre. Yo había terminado más que harto de sus tonterías y no tenía ninguna intención de empezar de nuevo. Al cabo de un rato escribí: “de acuerdo. tu pones el precio pero yo te pondré mis condiciones para que me compense contratarte”. Esta vez tardó un poco más en contestar. Supongo que estaba pensando en qué tarifa ponerme, pero también que estaba deseando que le echara un polvo. Siempre le gustó cómo la follaba.
    
    Su respuesta se demoró una media hora. Finalmente escribió: “mi precio son 200€. cuales son tus condiciones? si no me gustan no hay trato”. No se vendía barata la muy puta, pero me pareció bastante razonable teniendo en cuenta que posiblemente era la primera vez que lo hacía. Yo le contesté lo siguiente: “mis condiciones son estas: vendrás a mi casa y te trataré como a una puta. nada de conversación ni viejos recuerdos. los tres agujeros disponibles. y vístete de zorrón. no me vengas en vaqueros porque te echo a la puta calle. con un par de horas me basta para follarte”. Me respondió casi de inmediato: “de acuerdo. a qué hora quieres que vaya?”.
    
    3
    
    Aquí tengo que hacer un pequeño inciso para describiros a Ana. Es una mujer de unos cuarenta años, más bien delgada, como de uno setenta de estatura. Tiene unas tetas no muy grandes pero bonitas, es delgada, de piel muy blanca, con un bonito culo y un coño de esos con grandes labios que cuelgan un poco, que llevaba siempre pulcramente afeitado desde que yo se lo pelé por primera vez. Durante nuestra relación nunca la había follado por el culo, y siempre me había quedado esa deuda pendiente. Ahora por fin iba a saldarla. Y además con la ventaja añadida de que esta vez, como iba a cobrarme, ni ella podía negarse ni yo tenía que preocuparme por su disfrute.
    
    Cuando tuvimos esta conversación era un domingo a media mañana. Le dije que viniera esa misma tarde, sobre las siete. Y que fuera puntual, porque ...
«1234»