1. Tuya por primera vez


    Fecha: 16/04/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Liah, Fuente: TodoRelatos

    Offtopic:
    
    El relato está basado en un viaje, tengo 26 años y estoy de viaje en otra ciudad. Soy morena, con ojos azules casi grises. Mido 1,63 cm y peso 49kg.
    
    El otro protagonista, Oliver, tiene 24 años, es moreno también, tiene una pequeña barba y ojos marrones.
    
    Espero que podaís disfrutar del relato, intento ser lo más realista posible, si teneis alguna sugerencia, ideas o quereís poneros en contacto conmigo (siempre con educación o no contestaré) teneis mi correo liahnez7@gmail.com.
    
    Parte 1:
    
    La música inundaba todos mis sentidos, ibas entrando en mi cabeza desde el primer momento. Yo no podía dejar de ver tus dedos tocando la guitarra, sin pausa, casi con necesidad. Tu todavía no te habías fijado en mí, pero algo te llamó la atención en mi vestido rojo. Así qué, cuando acabaste de tocar te acercaste a la barra.
    
    Mi amiga dice que se ha enamorado al escucharte cantar - Tú sonreíste, tímido al principio, pero descaradamente me di cuenta de cómo me mirabas de arriba abajo.
    
    Está exagerando, ¿eso que tocas es música tradicional o qué es exactamente? - Pregunté, y por primera vez nuestros ojos se cruzaron.
    
    ¿Llevo una hora tocando, y ahora me lo preguntas?
    
    Hombre, no, es que no soy de aquí y es la primera vez que escucho esta música.
    
    Continuamos hablando un rato, me explicaste como habías empezado a tocar en ese pub desde hace unos años y nos dirigimos a pedir algo más de beber.
    
    Dos cervezas por favor – Fuiste a sacar la cartera y cayó justo entre el hueco que había conmigo y la barra – Recoge la cartera.
    
    ¿Es una orden? - Te miré evaluando cuál era tu reacción natural a esa pregunta, si, te estaba poniendo a prueba.
    
    Lo es - Volviste a clavar los ojos en mí, pero esta vez vi algo de lujuria en ellos.
    
    Me agaché lentamente, haciendo que sobresaliese mi culo para que te fijases en él, y sé que lo hacías mientras le dabas vueltas a lo que acababa de pasar. Te entregué la cartera en la mano.
    
    Buena chica – Susurraste en mi oreja, mientras yo me estremecía y tu disfrutabas de ello.
    
    Seguimos bebiendo, pero ambos sabíamos que ya no podíamos aguantar esta incertidumbre, me preguntaste cuando me iba y solo teníamos unas horas.
    
    Ven – Cogiste mi mano, y tuve que dar un último trago a la cerveza para seguirte hacía la parte de atrás del local.
    
    Abriste la puerta, allí había un sofá, y una mesa con algunas guitarras. Me fui a sentar en el sofá mientras te acercabas a una de tus guitarras.
    
    No te vas a sentar.
    
    Ah, ¿no? - Y al segundo te abalanzaste sobre mí, besándome con intensidad y mordiéndome el labio inferior.
    
    Y ahora, fuera ese vestido, y ni si te ocurra ir rápido, quiero disfrutarlo – Dijiste mientras me dejabas con las piernas temblando y te sentabas, sin dejar de mirarme un segundo – Te pido que recuerdes que, si en algún momento te sientes incómoda, di rojo y pararé.
    
    Asentí, después acaricie mis brazos subiendo hasta llegar al cierre del vestido, baje la cremallera aun mirándote. Paré un segundo ...
«1234»