1. Lo que la peste trajo consigo


    Fecha: 07/04/2024, Categorías: Incesto Autor: fabian.escritor.nocturno, Fuente: SexoSinTabues30

    ... Tímidamente tira de su mano, como pidiendo que Madi se ladee dándole acceso a aquel rico atributo que roba miradas en las calles.
    
    No seas tan tímido… – dice Madi coqueta sintiendo su piel erizarse- dime que es lo que deseas.
    
    Quiero tu culo Madi – le dice Fabián nervioso -mis compañeros siempre hablan de él cuando me vas a buscar al colegio.
    
    ¿ah sí? – responde Madi agitándose al imaginarse deseada por aquellas miradas -¿Qué dicen tus compañeros?
    
    Que te lo van a tocar – responde Fabián digo nervioso -que lo tienes rico, grande, que te van a puntear cuando puedan.
    
    Fabián toma a Madi firme ya de las caderas y mueve las suyas rozando su pene, que se ha levantado de nuevo en los muslos a medio ladear de Madi.
    
    Me gastan bromas…-contina Fabián – que yo nunca podré disfrutar de aquel culo.
    
    Y tú, ¿que sientes cuando tus compañeros dicen eso? – pregunta Madi mordiéndose los labios.
    
    Me da rabia -dice Fabián rojo -pero, a veces imagino que hago eso que ellos dicen… como si fueses mi mujer.
    
    Sus manos aprietan las caderas de Madi como para recordarle su oferta anterior, para luego por primera vez ir ladeándola.
    
    ¿de verdad deseas mi culo? – pregunta provocativa Madi, dejándose ladear.
    
    Si -dice Fabián – quiero…quiero que lo pongas para mí.
    
    Bueno, pues…. lo que tus amigos y compañeros desean – responde Madi – es tuyo.
    
    Acto seguido se termina de ladear, y deja en gloria y majestad aquel respingón y firme culo, que durante toda una vida ha enloquecido a muchos hombres. De inmediato las manos de Fabian lo toman y disfrutan de esas nalgas, apretándolas y abriéndolas, mientras su respiración se agita más y más.
    
    ¿Habías manoseado un trasero antes? – pregunta Madi empinándolo y haciéndolo hacia atrás para facilitar el disfrute de Fabián.
    
    Nunca Madi – dice excitadísimo Fabián mientras manosea y aprieta – siempre, había querido hacerlo. A veces imaginaba que me dejabas hacerlo, en especial cuando mis amigos decían esas cosas.
    
    Entonces manoséame como siempre lo has deseado – dice Madi – déjame sentir tus manos.
    
    En círculos Fabian goza del culo de su mami, apretándolo, disfrutando de lo parado que es por naturaleza. Lentamente Madi comienza a sentir como las manos de Fabian abren su culo, cachetito a cachetito y aquella mano se mete entremedio, siendo explorada por uno de los dedos de Fabián que lentamente se acerca a aquel punto.
    
    ¿Así mami? – le pregunta Fabián excitadísimo al irse sintiendo dueño de su intimidad.
    
    Sí sigue se siento rico como me tocas – responde Madi agitada mientras siente un dedito finalmente frotar su ano, suavemente. – extrañaba sentirme así de deseada.
    
    Fabián estira un poco más sus dedos, pudiendo sentir la humedad de la vagina de su madrastra. Aquellos deliciosos pliegues acompañados por esos vellos íntimos que le dan un golpe de morbo, al recordarle que se trata del sexo de una auténtica y crecida mujer.
    
    Es chiquito Madi -le susurra Fabián mientras masajea en círculos el ano de Madi – y ...
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