Dominado por mi vecina adolescente (18) - Relatos Eróticos

Dominado por mi vecina adolescente (18)

... preciosa, a ti lo te haré eso. Tu eres dulce, vaquita. Ellos son un cerdo y una asquerosa zorra. Eso es lo que les gusta-

Como afirmación divina. Irene soltó un grito de orgasmo como jamás la había oído.

-Sí, quiero ser tuya- dijo Laura.

-Así me gusta. Siéntate sobre mi polla y déjame ver cómo botan esas ubres-

Laura puso sus piernas abiertas sobre las de Ana, con sus enormes pechos en la cara de esta y suavemente se dejó caer sobre el consolador.

Fue un polvo lento, con amor, los gemidos de Laura eran suaves y delicados, se besaban, Ana chupaba las tetas de mi cuñada con cariño y ternura.

-Ama...ya estoy apunto ¿Puedo correrme?- preguntó Laura con la misma ternura que hasta ahora.

-Adelante vaquita-

-Ahhhh- fue un gemido suave, antes de caer rendida sobre Ana.

Ana le acarició el pelo y la cara, la besó de nuevo y dejo que recuperase fuerzas. Era increíble la diferencia de trato que tenía con ella, al que había mostrado con Irene o conmigo. Sabía darle a cada uno lo que requería.

-Ahora vas ha hacerme disfrutar a mi ¿Verdad preciosa?- dijo Ana empujando a la Laura hacia el suelo.

-Nunca lo he hecho, ama-

-Tranquila vaquita yo te enseño-

Laura llevó su boca al coño de Ana, que se había quitado el arnés, y empezó a lamer torpemente.

-Mas arriba-

-Ahi, ahora más rápido-

-¡Chupa ahí preciosa. Así rápido!-

-¡Ahhh lo haces muy bien vaquita!-

-¡MMM joder, me corro!-

Laura quedó de rodillas, muy cerca de mí, con su cara brillante de jugos y sonriente. Ana le indicó que se levantase y se sentase en su regazo.

-No ha estado mal, para ser la primera vez. Yo te enseñaré y lo harás aún mejor-

-Sí ama. Muchas gracias-

-Ahora vas a portarte igual de bien con mis amigas mientras yo me ocupo de la zorra de tu hermana ¿Vale?-

-Sí ama-

Fayna y Eva se desnudaron y se apoderaron rápidamente de Laura. Empezaron a magrear sus tetas y su coño, dejándola en medio de un maravilloso sandwich.

-Ama, por favor, no puedo más- suplicó mi novia

Podía imaginar lo que estaba sufriendo la pobre, yo estaba agotado del esfuerzo físico y, a eso, había que sumar los múltiples orgasmos que llevaba sin que yo me detuviese.

-¿Cuántas veces si ha corrido?- me preguntó

-Creo que cinco ama-dije

-Por favor ama. He aprendido la lección-

-¿Que lección zorra? Esto no es una lección. Este es tu nuevo lugar. Ya no eres mi zorrita. Ahora eres mi sucia zorra. Antes el cerdo estaba por debajo de ti, ahora son igual de despreciables y asquerosos-

-No ama.... Por favor-

Yo seguía follando duramente. Sentía verdadera pena por mi novia, rebajarse a mi nivel iba a ser muy duro para ella. Aunque estaba a las órdenes de Ana, disfrutaba de casi total libertad y yo no siquiera podía elegir mis erecciones.

-Tarde zorra ¿Te has corrido suficiente?-

-Sí ama. No puedo más-

-¿Segura?-

-Sí por favor-

-Esta bien. Cerdo para ya-

Me detuve y salí de ella. Ana la agarró por el pelo y la puso de pie a su ...