Dominado por mi vecina adolescente (18) - Relatos Eróticos

Dominado por mi vecina adolescente (18)

... la cara-

Si argumento no tenía respuesta posible. Era verdad, nosotros hacíamos todo por nuestra propia voluntad.

-Laura no es así. Ella es tan tímida y dulce...-

-No se yo- dijo Irene

Al día siguiente cuando llegué a casa, Laura no estaba, había salido de nuevo con Ana. Irene me esperaba en el sofá desnuda pero parecía triste.

-Hola ¿Estas bien?-

-Sí, bueno supongo- dijo acercándose a mí y empezando a desvestirme

-¿Qué te pasa?-

-Hoy a venido Adri a follarme. Me ha hecho escupir su corrida en tu cepillo de dientes, por si notas un sabor extraño- no lo decía feliz, ni sensual como solía hacer.

-¿Y que ha pasado? ¿Algo malo?-

Ya me había quitado la jaula y tocaba mi polla con un dedo. No la masturbaba, más bien jugaba con ella, la empujaba de un lado a otro y le daba golpecitos.

Se sentó en el sofá y yo me quedé de pie a su lado con mis manos a la espalda.

-Cuando empezamosa salir, está cosita me hacía feliz. No es que fueran los mejores polvos del mundo, pero no estaba mal. Después fuiste aprendiendo a comerme el coño y era perfecto cariño- dijo mientras seguía jugando con mi polla

-Gracias cariño-

-Hasta que apareció Ana. Sacó un lado de mi, y de ti, que no conocía, me llevó el placer a otro punto y me encanta ser su zorra-

-Lo entiendo amor-

-Me gusta como me trata, como me usa, pero sigo necesitando hombres, machos, pollas. Ella lo sabe y por eso me deja follar con Adri o con el que sea-

-Sí cariño ¿Dónde quieres llegar?-

-Pues que Adri estaba bien, venía a casa, me follaba duro y me quitaba la necesidad de ser empotrada. Pero el otro día con Juan Carlos... Fue... Fue distinto-

-No te entiendo-

-Pues tú deberías entenderlo más que nadie. Cuando te folló Ernesto, ese viejo gordo, casi te corres con la jaula puesta y no siquiera te van los hombres. Pero te gustó lo degradante que fue, lo sucio y usado que te sentiste ¿Verdad?-

-Sí, tienes razón -

-Pues eso me ha pasado con tu compañero. Fue tan humillante rebajarme a ser follada por él. Yo soy guapa y sexy, él es feo y ni siquiera se ducha y le tuve que suplicar que me follase. Nunca me había puesto tan cachonda ni tan zorra-

-Seguro que Adri podría hacerte eso...-

-No cariño. Adri sabe darme caña, pero Juan Carlos es distinto, es un putero y yo para él soy menos que una puta. Necesito que me folle de nuevo...-

Ahora Irene recorría con su dedo la parte superior de mi polla, haciendo presión, era como una paja pero sin agarrarme el rabo, solo por un lado. Y mi polla ya estaba dura como una piedra y mojándose la punta.

-¿Lo has hablado con Ana?-

-Sí, le he contado toda la historia-

-¿Y que te ha dicho?-

-Le ha gustado, se ha reído mucho, incluso dice que le ha dado ideas. Y que me lo folle cuando quiera, mientras no me de por el culo, claro-

-Pues adelante mi amor, yo no te lo voy a impedir-

-Claro que no cornudo, tampoco podrías. Es que me da miedo que más pueda hacerme, eso también tiene su morbo, claro. ...