1. Isolda y yo (Parte II): Punto de vista de Isolda


    Fecha: 05/03/2024, Categorías: Lesbianas Autor: Amorclandestino, Fuente: CuentoRelatos

    ... palabras, además de protegerla, deseaba POSEERLA, hacerla MÍA, hacerla MI MUJER. Era pensar en ella y en estar a su lado y empezar a sentir ese dulce calor recorriendo mi cuerpo. Era todo algo extraño en un principio porque nunca antes me sentí atraída hacia ninguna mujer, aunque a la vez no me sorprendía tener ese tipo de imaginación y pensamientos hacia ella. Como que era ya algo que salía natural en mí, instintivamente. Incluso me sentía más cómoda que nunca imaginándome esas cosas, siendo yo quien asume ese rol dominante/protector, nada que ver con cuando me imaginaba con un hombre, ni punto de comparación, eso era mucho mejor. Sentía que ese era mi rol natural y que en el fondo siempre había sido así. Empecé a replantearme mi sexualidad como nunca antes. Al principio pensaba que quizás estaba confundiendo las cosas, pero con el paso de los días y de mis visitas con ella era cada vez más intenso lo que sentía y su estancia en el hospital ya fue la oportunidad definitiva para conocer bien a Cleo y aclarar mis dudas y fue cuando me percaté de que aquello que sentía era real y de lo enamorada que empezaba a estar de ella a raíz de habernos conocido mejor. A partir de ese momento, pero, me asaltaban otras dudas: no tenía claro si me gustaban tanto las mujeres como los hombres, si lo mío eran realmente las mujeres y ahora me estaba dando cuenta de mi verdadera sexualidad... La verdad es que no sabía ya ni cómo definirme, aunque el hecho de no dejar de pensar en Cleo y de enamorarme de ella me hacía sentir más lesbiana que otra cosa. Llegué al punto de imaginarme en una relación seria y formal con ella, siendo yo la parte fuerte, dominante y protectora y ella la parte más delicada y sumisa.
    
    Era algo nuevo para mí, ya que, reitero, nunca había sentido algo así hacia ninguna mujer. Y aún menos con una paciente. Sabía que lo que sentía ya iba más allá de una mera curiosidad o de simplemente sentir aprecio y querer entablar una simple amistad. Con ella, todo era diferente.
    
    La hermosura y la delicadeza de Cleo empezaron a asaltar hasta mi vida onírica. Cuando empecé a soñar con ella tenía un sueño muy recurrente en el que yo era una bella diosa guerrera de la mitología germánica-nórdica (un tema que siempre me ha interesado y me ha encantado), concretamente, que era una versión femenina de Thor. Entonces, ella se encontraba en un grave apuro en Brezal de Gnita siendo atacada por dragones, desesperada, temblando y paralizada del miedo y yo la acababa salvando y caminando victoriosa llevándola en brazos rumbo a Bilskirnir, nuestra residencia, mientras ella se recompone del susto, entre lágrimas me dice «eres mi heroína» y nos besamos. Yo su heroína, ella mi doncella. Yo su Thor, ella mi Sif. «Isolda», nombre germánico que significa «guerrera fuerte y dominante»... con el paso de los años el significado de mi nombre cobraba más sentido en mi persona. Y lo cobrarían aún más a raíz de este experiencia mía en mi faceta afectivosexual. Y no tuve ese ...
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