1. Mi sobrina y su prima del pueblo 1


    Fecha: 04/03/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: CacharroLoco, Fuente: TodoRelatos

    ... hacía volvería a follarle con los dedos. La agarro torpemente y me empezó a pajear mirando mi polla. Mi sobrina puso su mano encima de la de ella, y le fue indicando como hacerlo. Estuvo así un rato notando como me ardía y lo dura que estaba. Mi sobrina le sonrió, al ver que ya lo hacía bien, me empujo a la mesa. Me apoye con un codo en la mesa para que no nos vieran desde el sofá y mi sobrina se levantó y se puso detrás de mí. Le bajo una mano por el cuello a Esther acariciándola, y colándola por su camiseta atrapo uno de sus grandes pechos diciendo:
    
    -Estas también dan para cubana, a mi amo le encantan las cubanas bien hechas. -le dijo sobándolo y cambiando al otro.
    
    Esther tragaba saliva, le encantaba como le sobaran las tetas, y mi sobrina sabia como hacerlo. Levanto la vista y le sonrió agradecida, pero le dijo:
    
    -Quiero ir al baño, por favor.
    
    -Vete, pero vuelve sin sujetador. Y como me hagas enfadar se va a enterar todo tu pueblo de las cochinadas que haces con Claudia. - le dijo mi sobrina apretándole el pecho con fuerza.
    
    - ¡¿Pero, quien te lo ha dicho?! ¡no hacemos nada!
    
    -Volví a cogerla del muslo y le dije:
    
    -Vale más que le hagas caso, no la hagas enfadar, te esperamos en la terraza.
    
    Agacho la cabeza, me aparte con la silla y se fue al baño. Mi sobrina me abrazo y me empezó a besar y a lamer por el lado de mi cabeza que no podían verla.
    
    -Me he puesto muy cachonda con la tonta esta, igual me pillo una sumisa. Pero con más culo- me dijo, y reímos los dos.
    
    -Pero si ya haces lo que quieres con Sonia, no te quejes. -le dije.
    
    -A Sonia la quiero, a esta solo la usare y si no le gusta, que se busque otra habitación- me contesto mí no tan dulce sobrina. Ya iba aprendiendo.
    
    - ¿Por qué te crees que le atacaba? - le pregunte sonriendo.
    
    Me miro, abrió los ojos y me dijo riendo:
    
    -Ya me extrañaba que te pusiera la cuerpo triste esta. - y reímos los dos.
    
    Conseguí meter la polla en el pantalón y me fui a poner más cómodo. Todas estaban ya con sus pijamitas o en bragas y camiseta, como Sonia y mi sobrina que se quitaron los pantalones en cuanto se fue Claudia madre, y nadie se había dado cuenta.
    
    Esther en el baño se miraba sin sujetador y le daba muchísima vergüenza, también se palpaba su coñito, y lo notaba hinchado y muy caliente. Había gozado con mis dedos dentro, y cuando imaginaba mi polla entrando en ella, se le aflojaban las piernas. Se volvió a mirar, suspiro y salió del baño.
    
    Mi sobrina la esperaba fuera sonriente. La hizo parar y alargando sus brazos le cogió los dos pezones sobre la camiseta y se los empezó a retorcer con suavidad. Los noto crecer, y veía a Esther como la miraba cachonda. Le soltó los pezones y le dijo:
    
    -Así mejor. Ve a la terraza y espera.
    
    Esther asintió y se fue. Paso delante de Sonia y Claudia, y ni la vieron. Busco la terraza y me vio sentado en un sofá de mimbre que ya estaba en el piso cuando lo compre. Se acerco a mí y se quedó de pie.
    
    -Ven, siéntate.
    
    Se sentó ...