Mi hijastra es mi amante - Relatos Eróticos

Mi hijastra es mi amante

... hacia mi pene ,así seguimos hasta llegar a casa , cuando entramos a casa quería reprenderla y poner límites a esto.

No entiendo el porqué no podía ponerme estricto y ponerle un alto a las cosas fuera de lugar que se estaban presentando últimamente entre mi hijastra mayor y yo.

Mi hijastra menor se había ido con el abuelo de paseo ,justo antes de ir recoger a la mayor al colegio , así que solo estábamos mi hijastra mayor y yo en casa.

Ya que era mi día libre y me había despertado temprano y ya había hecho algunas tareas de la casa . Me merecía una siesta y así lo hice . Le avisé a mi hijastra que iba tomar una siesta y que por favor no me despertara solo si era algo urgente.

Estaba profundamente bien dormido , ni escuché el celular cuando me llamó mi esposa para avisarme que llegaría algo más tarde a casa .

Justo hablando de mi esposa , estando con Morfeo no sentí ni note cuando alguien abrió la puerta y se acostó a mi lado .

Cuando ya estás acostumbrado a dormir con alguien al lado , tu subconsciente también lo está así que para mí y mi subconsciente era mi esposa quien estaba a mi lado. Ni la mente ni mucho menos mi subconsciente tenían idea de que quien había ingresado y estaba a mi lado era mi hijastra.

Además de lo que había mencionado sobre estar acostumbrado a dormir acompañado, también te acostumbras a esas cosas que suceden en pareja . Así que cuando sentí como me tocaban el pene , entre dormido y despierto dije: amor estoy descansando déjame dormir .

El contacto era cada vez más caliente y placentero … mi pene se despertó más no mi cuerpo .

Deje que sacará mi pene de mi jogger y lo manipulara a su antojo … sentía como su lengua me daba placer por mi glande y todo mi tronco.

Aquello tan rico obviamente me activó un poco … pensando aún que era mi esposa .. quien estaba en la cama y como ella acostumbrada también a hacerme rutinas así…. La tomé de la cintura y le di vuelta . Para quedar de cucharita contra ella , nos encantaba esa posición a ambos.

Me quité todo lo que quedaba de ropa sobre mis piernas , dejando mi tronco bien lubricado solo esperando que le diera la orden de atacar sin piedad.

Le bajé el short y las bragas y el juego previo siempre era rozar mi tronco sobre sus nalgas . Le abría espacio a mi pene con las manos y lo ponía sobre su vagina y jugaba un rato para que se mojara bien y estuviera bien preparada para dejar entrar a mi bestia.

Cuando le puse la punta de mi pene sobre el ano. Un gemido de ella me pareció extraño . Mi esposa no era de gemir en el juego previo … ella dejaba salir sus gemidos justo cuando tenía su órgasmo . Ese gemido me puso más caliente … volví a pasar mi pene por su ano pero está vez .. lo puse en posición de entrada y suavemente lo introduje un poco… solo quería meter la punta y hacer que se volviera loca. ( Falta de más decir que el sexo anal entre mi esposa y yo . Era parte de la rutina y nos encantaba, más a ella que a mí ) .

Estaba entrando la punta de ...