1. Femdonia. Paseo por el otro lado(II)


    Fecha: 20/01/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: slipper, Fuente: TodoRelatos

    ... oye fue mano de santo, desde ayer está más suave que un guante.
    
    Luisa estaba realmente cómoda hablando de aquello, sentada en una silla giratoria sin parar de mirar a su subordinado, que estaba de pie, apoyado a una mesa, mirando el móvil más avergonzado que otra cosa, mientras que la otra limpiadora, miraba algo en uno de los ordenadores que había allí, sin hacer mucho caso a nuestra conversación; todos llevaban su uniforme de limpieza pantalón y camisola blancos, y Luisa azul celeste para distinguirse.
    
    -Pero que pasó exactamente Luisa, ¿le pegaste allí, en medio de todo el mundo?
    
    Yo ya imaginaba que no, pero quería detalles, así que se me ocurrió aquello para seguir tirando del hilo.
    
    -Pues eso tendría que haber hecho, haberle dado allí delante de todo el mundo jajaja, pero no, cuando terminamos de limpiarlo todo me lo llevé al cuarto de limpieza y allí se lo expliqué, pero bien…allí tengo siempre un cinturón colgado de la percha para estos casos, lo cogí, y le dí una de correa… tiene que llevar todavía el culo bien marcado, ¿verdad Jose?
    
    Luisa alternaba en su discurso hablar como si él no estuviera presente por un lado, y por otro interpelaba directamente al pobre chico, que apenas decía nada, a la paliza recibida el día anterior tenía que sumarle la humillación de ahora.
    
    -Jodo, pues la correa debe de picar lo suyo._ dije yo estirando aún más el chicle.
    
    -¿La correa? La correa es una maravilla, Jose, enséñale a Ramón como te puse el culo.
    
    El pobre chaval se quedó a cuadros, no podía abrir más los ojos ante la sorpresiva orden de su jefa.
    
    -Pero Luisa, como se lo voy a enseñar aquí, nos puede ver todo el mundo.
    
    -He dicho que se lo enseñes!!!
    
    Entonces Jose se volvió a poner como un tomate, dejó el móvil sobre la mesa que estaba apoyado, se dio la vuelta y se bajó de un tirón el pantalón blanco de su uniforme y el calzoncillo, y todos pudimos ver las marcas que había dejado la correa el día anterior, le habían dado una buena paliza al pobre, aún se observaban unas marcas violáceas que atestiguaban que la tunda había sido morrocotuda.
    
    -¿Se puede saber que pasa aquí?
    
    Era mi Ama, ni siquiera la habíamos visto llegar, se hizo un silencio espeso, Jose se subió rápidamente la ropa, Sonia dejó de mirar el ordenador y Luisa se calló a la espera de acontecimientos, respetaba mucho a mi Ama, y además estábamos en su territorio donde ella era la dueña y señora, así que ni siquiera se atrevió a decir que había sido ella misma la que había ordenado al pobre chaval a enseñarnos las marcas de su castigo.
    
    Por el tono de mi Señora sabía que las cosas se estaban poniendo feas, pero si nadie hablaba, tendría que hacerlo yo, así que me levanté, y dije.
    
    -Pepi, es Jose que nos estaba enseñando las marcas de su castigo de ayer. Dije sabiendo que la estaba cagando.
    
    -Eso ya lo veo, no soy tonta (me fulminó con la mirada… Y vosotros, no tenéis nada que limpiar?
    
    -Si sí, ya nos vamos, venga vamos a la tercera planta, que allí ...
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