1. Tu, mi complemento perfecto 3


    Fecha: 03/09/2019, Categorías: Lesbianas Autor: Bella15, Fuente: TodoRelatos

    ... como ella pensaba.
    
    —Las cosas no son tan sencillas y lo sabes—resopló—Si bien, eres el único familiar con vida que tiene Eliott, no puedo prometerte que mientras tú organizas tu vida, el seguirá esperándote —sentenció.
    
    —Lo sé —dije cabizbaja.
    
    Pese a mis buenas intenciones, me sentía perdida, pues no estaba segura de recuperar la custodia total de mi hermano, aun cuando he cumplido mi mayoría de edad, ¿Por qué todo tiene que ser tan difícil?
    
    —Malya —pronunció.
    
    —¿Sí? —dije por inercia.
    
    —Trataré de mover mis contactos, pero mientras el proceso sigue su curso, deberá buscar un empleo. Ya sabe, para demostrarle a un juzgado que usted puede velar por su hermano —comentó.
    
    —Haré lo que esté en mis manos para buscar dos empleos de ser necesario —entrelacé mis manos, tal como si con esa acción pudiera dar por hecho que así sería.
    
    —Eso espero—me regaló una sonrisa—Ahora vaya con su hermano, es momento de que se despida de él —expuso, sin más.
    
    —¿Puedo quedarme esta noche? Solo quiero estar más tiempo con mi hermano —supliqué.
    
    —Considerando que solo podrá visitarlo los sábados, me parece una petición accesible —expresó.
    
    —Gracias, no tiene idea de cuánto significa para mí —estreché sus manos a modo de agradecimiento.
    
    —Lo sé, por eso lo hago —dijo, al retomar sus labores.
    
    Me incorporé de la silla, con la firme intención de ir en busca de mi hermano para entablar una conversación no tan amigable, ¿A quién le gusta despedirse de un ser querido? Para irse lejos y comenzar una nueva vida, porque sinceramente, a mí no me estaba agradando hacer ese numerito, no después de haberme despedido de mis padres en un cementerio. Mientras caminaba, veía pasar a los niños con quién compartí los últimos meses y me di cuenta, que tal vez, y solo tal vez, echaría de menos este hogar o más bien, echaría de menos compartir más seguido con mi hermano, porque a partir de ese día, él debía cuidarse por su cuenta, ya no me tendría a mí para intimidar a esos chicos que le hacían maldades.
    
    —¿Con que aquí estabas? —escuché a mi espalda.
    
    Al girarme, me topé con una viva copia de mi imagen, pero en versión, niño. Desde los rizos castaño que eran iluminados por algunos reflejos más claros que formaban un castaño dorado natural, hasta el toque cálido de nuestra piel blanca, pues lo único que nos diferenciaba, aparte del género, era el color de nuestros ojos. Mi hermano sacó los ojos azules de mi madre, mientras que yo saque los ojos avellana de mi padre y si corría con suerte, hasta podría sacar su estatura de un metro con setenta.
    
    —¿Cómo te fue? —preguntó, al darme un poco de su helado.
    
    —Bien, dentro de lo que cabe —respondí, al devolverle su barquillo.
    
    —Al salir de aquí, ¿Buscarás a Charlie? —soltó de repente.
    
    —No lo sé —desvié la mirada.
    
    —¿Cómo que no lo sabes? —me reprochó.
    
    —Eliott, seguramente ella debe estar con alguien más y yo no soy quién para estropear su vida —mencioné, con la leve esperanza de que no fuese cierto, pues ...