Bendita Perversion: Damian y su Vecinita 2da parte - Relatos Eróticos

Bendita Perversion: Damian y su Vecinita 2da parte

... poco….y quiero hacer pis.

D: Meate acá, y aguanta el dolor pendejo, te voy a preparar esa colita, vas a saber lo que es recibir pija- Empezó a mearse en mi mano, mientras gemía, en unas horas se estaba convirtiendo en una putita sucia

A: ahhhh mmmmm duele…

D: ¿No te gusta?

A: Si, me gusta, no pares papi….

D: Como aprendes rápido putita eh… yo te tenía inocente, pero te re gusta. Cuando lleguen mis amigas vas a pasarla muy bien. Ahora proba lo rica que sos- Saque mi mano y le hice lamer los restos de su cola y su meo, la pendeja chupaba como su fuera el postre más delicioso del mundo. Su carita roja y sudada era un poema. El sabor y olor de mi mano prendían mi pija con fuerza. Yo la besaba y lamia, mientras le apoyaba la pija, y disfrutaba el sabor de su piel. – Vas a ser mía verdad?

A: Si, toda tuya… quiero que me hagas esto siempre

D: Ahhh, pero re entregadita estas. Me parece muy bien. Vas a tener un macho que te atienda bien al lado de casa. – Ella seguía gimiendo medio dormida, mientras alternaba entre meterle los dedos en el orto, y darle de probar. LA seguía besando, y lamiendo, me encantaba ese cuerpito pequeño, lleno de pecas, inocente, siendo ultrajado por mi morbosidad. Fue como media hora de manosearla y besarla, con ella entredormida, hasta que sonó el timbre. – Ahora vuelvo Angelito, y seguimos, llego tu sorpresa. No me contesto apoyo su cabeza en la almohada y cerró los ojos.

Baje a abrir la puerta, y ahí esperaban mis tres ángeles, tres pendejas infartantes, y zarpadas. Me abrazaron efusivamente, y me besaron como siempre, con pasión y lujuria. Rosario, mi cuñada, el amor de mi vida, Kalu, la cumbierita morena, con ese culo del mismo diablo, y Mili, que tenía las tetas más grandes que haya visto en mi vida. Rosario me dio esos besos onda novia que me da siempre, haciéndome saber que mi verdadera mujer es ella. Kalu, sapada me beso, y me puso una tanga usada en la cara, haciéndome saber que podía garcharmela ahí mismo si quería, y Mili un beso tímido que se descontrolo cuando le manosee las tetas y le abrí la remera, para lamérselas atrás de la puerta.

Rosario: Veo que estamos todos re calientes eh… mira como tenes la pija, – Yo estaba en bolas, con la verga a mil.

D: si, y tengo la sorpresita arriba, hoy nos pegamos alta enfiestada…

Kalu: Piola, yo traje esto para divertirnos en la fiesta- Y saco una bolsa llena de flores para fumarnos.

Mili: No sé, la nena que mandaste la foto es muy chiquita, le puede hacer mal.

K: No seas cagona, después te recabe como cogemos todos fumados

M: No es lo mismo, es una nena chiquita..

R: No jodas Mi, dami la acaba de coger toda y la pendeja se quedó dormida ahí, la va a pasar re bien.

M: No se… me parece que nos vamos al carajo

K: Sos una cagona….- Yo escuchaba divertido la conversación entre las adolescentes que se preguntaban si enfiestar o no a una nena 3 años menor que ellas. Mili siempre fue insegura, pero sabía que, si yo daba el ok, ella iba ...