1. Anna y Giovanna.


    Fecha: 17/09/2023, Categorías: Lesbianas Autor: Juan Alberto, Fuente: SexoSinTabues30

    ... des tantos rodeos al asunto … ¿lo hicimos o no lo hicimos? – le sonreí y tocando sus labios con mis dedos– lo único que hicimos es que yo te deje en la puerta de tu casa y te di un pequeño beso de buenas noches en tu labios … ¿qué puede haber de malo en eso? … somos amigas ¿no? –
    
    Giovanna se toco sus labios y se sonrojó como una adolescente– perdóname, Ana, pero no sabía si había sido verdad o no … me recordaba ese beso, pero nada más … tus labios me rozaron y me encendieron … me desperté esta mañana con mi consolador a mi lado y no sabía nada de nada … solo me recordaba haber recibido un beso tuyo … solo eso … ¿me perdonas? – me dijo con una voz más serena– ¡por supuesto que te perdono, mujer! … somos amigas … pero tus labios me quemaron la piel … fue un brevísimo y hermoso beso – le dije en el mejor tono de voz para demostrar mi complacencia por aquel ósculo robado, Giovanna bajo la vista visiblemente afectada– ¿te la sientes de acompañarme a tomar un café, después del jolgorio de anoche? –le pregunté en tono jocoso– por supuesto que sí … pero esconde esa botella de anoche, porque el solo verla creo que me haría vomitar … ¿de acuerdo? – bajé del tractor y la tomé por la cintura y nos fuimos riendo camino a la casa.
    
    Ella mucho más joven que yo, casada, solo de pasada en el pueblo,− ¿en qué momento creí que podría tener una relación con ella? – pensé, no quería ilusionarme de nada, pero algo lindo me sucedía en mi guatita, sentía ese hormigueo, esas maripositas, ¿me estaré enamorando?, no quería admitirlo, no quería sufrir un rechazo, así que trate de enfrentar la realidad y aterrizar mis sueños imposibles, dentro de mi había una voz que me decía – tonta, al amor no se comanda – y lo que es peor no sabía distinguir si era el ángel bueno o el ángel malo.
    
    Nos seguimos comunicando y visitándonos casi a diario, ella había contactado un tasador de propiedades para ver el valor de la propiedad y le dijeron que habían enviado los pormenores a Varsovia y pronto tendrían la respuesta, fue en esa ocasión que me dijo– espero tanto que seas tú quien se quede con esa propiedad … voy a extrañarte porque me gustas mucho – hizo una pausa y luego añadió– quise decir que tu compañía es muy agradable … me agrada ser tu vecina y que podamos conversar de todo con plena confianza – como para aclarar su dicho anterior, yo continuaba confusa, así que sonreía como una boba y asentía con mi cabeza.
    
    Pasaron algunos días y ella volvió a visitarme, mientras conversábamos detrás del granero y mientras yo ordenaba los surcos de una siembra de frutillas, ella me dijo casi como un comentario más– tú me gustas … −no agregó nada más, así que tratando de sujetar a mi corazón que latía a mil, y conservando un tono de voz serio, le dije− ¿cómo es eso? … ¿es eso posible? – Giovanna tenía su rostro rojo color escarlata– eres una mujer muy sólida y también muy linda … de buenos sentimientos y me gustas como mujer – me lo soltó todo así cómo de sopetón que me dejó sin habla, ...
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