1. Una decisión importante. (2/2)


    Fecha: 15/08/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Fernando, Fuente: TodoRelatos

    ... a mi verga, que entraba en su vagina hasta los mismísimos huevos sin oposición:
    
    —Diooooos mi amor, —gimió Vanesa,— me encanta como me abres cuando me la metes, es una sensación que no quiero dejar de sentir.
    
    —Eres muy estrechita, tu coñito está hecho para mi polla…
    
    —Follameeeeh…no dejes de hacerlooooh…—Gimió de gusto Vanesa.
    
    Empecé a follarla con tranquilidad. Después de dos corridas increíbles con esa diosa, una tercera tardaría mucho en llegar, pero mi rabo parecía una roca ya que no quería bajar su dureza.
    
    Vi su anito boqueando, rosadito, y después de toda la semana entrenándolo, dilatándolo y follándolo con todo lo que tenía a mí alcance, creo que ya iba siendo hora de que conociese una buena polla bombeando dentro de sus intestinos.
    
    Mientras me la follaba, haciéndola disfrutar, empecé a meter en su culito mis dedos, aprovechando la lubricación natural que ya tenía. Fue sentirlos dentro de su culo y Vanesa empezó a temblar anunciando un nuevo orgasmo:
    
    —Dioooos Marcoooo…que rico por Dios…sigueee por lo que más quieras…no pareeees…
    
    —No pienso dejar de hacerlo, te voy a reventar a pollazos…
    
    —Joder siiiiiii…siiiiiiiii…me corrooooooh…maaaas…maaas…
    
    Cuando noté que mis dedos entraban en ella sin dificultad, tomé el dilatador más grande y lo lubriqué bien. No era la primera vez que se lo metía, de hecho su anito empezaba a estar tan acostumbrado que solo había que prepararla un poco y se lo introducía sin apenas resistencia, pero esta vez sería muy diferente ya que mi polla bombeaba dentro de su coñito, sería como una doble penetración.
    
    Cuando se lo fui a introducir, saqué mi balano de su interior y apuntando a su anito introduje ese falo de plástico hasta la empuñadura, con un gemido gutural por parte de Vanesa:
    
    —Joder…joder…me voy a correr otra vez…Dioooos…
    
    —Pues queda lo mejor mi vida. Siente esto. —Dije metiendo mi polla de nuevo en su coñito, hasta que mis huevos rebotaron en su clítoris.
    
    —¡¡AHHHHHH…POR DIOOOOOS QUE GUSTOOOOOH!! —Gritó Vanesa empezando a correrse de nuevo.— No pares…más…maaaas.
    
    Bombeé con furia ese coñito mientras metía y sacaba el dilatador anal de su culo. Las caderas de Vanesa se movían descontroladas y ella misma intentaba empalarse echando su cuerpo hacia atrás. Clavé de nuevo el dilatador en su culo y tirando de ella la hice ponerse de rodillas mientras mis manos se apoderaban de sus tetas, mis labios de su cuello llenándola de besos y seguía follándola con desesperación, con fuerza, con profundidad. A cada embestida mía, un gemidito muy sensual salía de la garganta de Vanesa que no dejaba de encadenar un orgasmo tras otro. Y entonces pensé que había llegado el momento, que ese culito debía de sentir una buena polla follándolo. Era un culo para admirar y ahora se me ofrecía la oportunidad de usarlo para mi disfrute y el de ella, sabía que sería toda una experiencia, para los dos. Cuan equivocado estaba.
    
    Con solo un movimiento por mi parte, Vanesa volvió a ponerse en cuatro ...
«12...789...33»