Cuando se te sube el muerto - Relatos Eróticos

Cuando se te sube el muerto

... me la metió toda de golpe, los testículos de plástico aplaudían en mi entrada, afuera, adentro, afuera, adentro, me soltó las piernas para metérmela más duro, poniendo mis pies en el colchón subí lo más que pude mi pelvis para sentir mas esa dura penetración, ambas jadeando, más bien bramando estábamos al borde del orgasmo, me clavo las uñas en las nalgas, mordiéndome uno de mis hombros empezó a correrse, al mismo tiempo la jale de la cadera, pegando más mi concha en su verga empecé a soltar chorros de mis fluidos, apretándole las nalgas quedamos ambas desfallecidas

Cuando nos repusimos ella sobre mi me acariciaba la mejilla, y enredaba mis dedos en sus cabellos, nos besamos enredando nuestras lenguas, de repente ella me dijo “estas deliciosa zorra”, mis piernas se enredaron en su cadera y le dije soy tu perra, apretándome uno de mis pechos con fuerza me pregunto ¿Quién es tu macho perra? gemí duro, susurrándole al oído le dije “tu eres mi macho papi”, ella me mordió mis pechos, mis dedos se clavaron en sus hombros, me exigió muévete perra asquerosa, ordéñame la verga, la beso en la boca, bebiendo su saliva, ella se prende más, le mamo las tetas, ella me agarra de los cabellos, sigue así puta, chúpame aaahhhh... ohhhh mmmhhhh mmmhhh, quiero sentir tu lengua, quítame las ganas perra, y me dice "quiero verte como la perra que eres"

Se me desenchufa y volteándome me levanta de la cadera poniéndome en 4, le ofrezco el culo meneando la cadera en círculos sintiendo su verga en mis nalgas, ella me muerde, me clava las uñas y me la mete duro, de repente le digo por ahí no papi, dame por el culo, ella me agarra de los cabellos, me empina fuerte, siento que me escupe en el ano y me la empieza a clavar duro, parando más el culo me dijo “que suerte tuve, encontré a una ramera en celo,

- Agh!!! Duele, uhm, duele!!

- Así perra, chilla, uhm!

- Me duele el culo, me destrozas

Me tomo con más fuerza y empezó a metérmela con fuerza, solo sentía desmayarme, el dolor era inmenso y ella no se iba a detener.

- Muévete perra, no te quedes quieta!

- Papi me estas destrozando toda, uhm!

- Toma puta, tómala toda, uhm, agh!

- Agh! uhm, uhm, ah, ah, ay!!!

Al parecer mis gemidos la ponían más y más caliente, ella me jalaba del cabello y me metía más su enorme dildo, yo movía mi cadera cabalgando su falo como loca, gemía, gritaba, me dolía pero el placer era mayor, me sentía morir, el placer era inmenso pero el dolor me tenía sufriendo, yo seguía moviendo y gritando hasta que ya no aguante más y comencé a venirme, ella también comenzó a venirse, el orgasmo fue fenomenal, la habitación se llenó de gritos, después de esa explosión se derrumbó sobre mí, quedando ambas desfallecidas

En la madrugada me despertó un ruido, escuchaba el clásico ruido de que mamaban algo, ella estaba parada frente al espejo, yo miraba su blanca espalda y sus redondas nalgas, lo que vi en su espalda me recordó el sueño que tuve, tenía tatuada la espalda con alas ...