1. Una más en el cuerpo


    Fecha: 14/08/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... seguir torturándole decido levantarme de esa máquina y ponerme ahora al lado suyo para comenzar con unas sentadillas y que pueda observar mi culo perfectamente definido gracias a mis shorts de lycra.
    
    - ¡Joder, que puta tortura! - dice levantando una gran pesa, pero parece que lo dice por mi culo, que corroboro cuando giro mi cara hacia él y veo que no me ha quitado ojo del trasero.
    
    Me levanto y me dirijo hacia él y le pregunto:
    
    - ¿Estás bien, Martin?
    
    Y él levanta la cabeza y me mira esta vez a los ojos y veo esa mirada que está ardiendo de deseo como lo estoy yo. Cuando parece que va a haber algo más que palabras, en ese momento entra el capitán en el gimnasio. Su mirada también se dirige, primero a mi culo y después inevitablemente a mi escote.
    
    - Hola, chicos, os estaba buscando. - nos dice y aunque intente disimular no es capaz de mirarme a los ojos pues su vista se pierde en mi canalillo.
    
    - Dime Alfredo, ¿Qué quieres? - pregunta Martin, que tapa su notable erección con una pequeña toalla.
    
    - Necesito que le enseñes a Tania como cargar las motobombas con diésel, que están vacías.
    
    - Claro jefe. Nos damos una ducha y vamos para allá. - añade Martin y salimos del gimnasio en dirección al dormitorio para cambiarnos.
    
    Yo paso delante de los dos hombres, con toda la intención del mundo porque me encanta sentir sus miradas clavadas en mi culo, hasta que por fin llegamos Martín y yo frente a nuestras taquillas que están precisamente contiguas.
    
    - Bueno, si quieres cámbiate tú y después lo hago yo. - me dice él caballerosamente.
    
    - No seas bobo, Martín, recuerda... somos compañeros. - le digo y bajo mi short lentamente con movimientos de mis caderas para quedarme con mi pequeño tanga blanco ante su atónita mirada.
    
    - ¿Estás segura? - me pregunta observando mi entrepierna apenas cubierta por esa pequeña braguita que mira hipnotizado.
    
    - Claro, recuerda: trátame como si fuera una más. - añado sacando el sostén deportivo haciendo que mis tetas salten ante sus ojos como platos
    
    - ¡Joder! - dice él.
    
    Y tras dudar unos segundos, veo como al final él se baja el pantalón, dejando a la vista su bóxer marcando ese notable bulto. De pronto, al estirar mis manos para colocar una pinza que recoja mi pelo, hace que mis pechos suban más y mis pezones se alcen, provocando que Martín se rinda ante eso y se abrace a mi cuerpo.
    
    - ¡Lo siento, Tania...!, ¡Estás demasiado buena para resistirse! - añade.
    
    - ¡Joder, no lo sientas!, ¡Pensé que no lo ibas a hacer nunca! - añado yo, apretando con mis dedos el bulto de su pequeño slip y metiendo la mano dentro de él.
    
    Me encanta sentir esa dureza que hay debajo al aferrarme a su tronco que crece aún más entre mis dedos
    
    - ¡Joder, no me creo que esté pasando esto! - dice con su voz temblorosa mientras mi mano sigue abarcando ese largo tronco que hay bajo su slip.
    
    - ¡Ni yo tampoco! - añado y le doy un beso tierno en los labios.
    
    El beso acaba siendo un morreo en toda regla, ...
«12...91011...36»