La pequeña María II - Relatos Eróticos

La pequeña María II

... mientras tiembla ligeramente hasta que deja salir un gran suspiro ya para terminar de una vez me moví rápidamente haciendo que gimiera con fuerza hasta que la llene muy en lo profundo –“todo lo tuyo es fantástico, María”, descanse un poco aun con mi verga dentro de ella hasta que se salió solo –“arreglémosno rápido y vayamos a comer pastel” después de un breve momento ya estábamos dirigiéndonos a la pastelería lo cual pedí para llevar para llegar lo mas pronto posible luego nos separamos cuando la deje en su casa y al poco tiempo ya estaba en la mía por suerte nadie pregunto nada pero en ese momento me puse a pensar quien vergas era el suertudo que estaba entrenando a María porque estaba haciendo un excelente trabajo.