La pequeña María II - Relatos Eróticos

La pequeña María II

... –“que suerte, justamente me llamó mi mamá que le surgió algo y me vendría a buscar más tarde (y en mi mente gritaba ¡LUCKY!), en esa veo que llama la mamá avisándole de que yo la llevaría de vuelta a su casa –“mi mamá si me dejo” lo dijo sonriendo y le digo sobre la niña con quien hablaba por si también necesitaba que la llevara me dijeron que no porque vivía cerca y cierra la puerta. –“¿cómo está mi mujercita?” –“bien” y le doy un besito en la boquita y continuamos conversando de regreso luego le pregunto sobre su primo, pero no me dijo mucho y le acaricio es muslito –“hace tiempo que no te lo hago, ¿quieres?”

Y su cara no se mostraba muy a favor –“y luego pasamos por la pastelería” –“ahora si quiero” y me soba sobre el pantalón así que me meto por un calle solitaria que no tenía casas muy cerca y apenas dejo a la vista mi verga María ya lo estaba chupando ansiosa –“wao niña como has aprendido” chupaba mientras pasaba su lengua por toda la grande y lamia todo de arriba abajo mientras paso por debajo de ella mi mano hasta llegar a su caliente coñito pero como una collar de perla colgando y como me fastidiaba un poco la mano tiro de ella -¡Ay!, cuidado con eso” me dice maría así que rápidamente llevo mi mano a su culito y precisamente hacia allí iba dirigida –“¿qué es esto María?” –“algo” –“háblame bien, ¿no somos amigos?” y me evita la mirada, pero a los segundos se resigna –“ok son como tres pelotas dentro de mi culito” –“¿y de quiénes son?” –“es un secreto” tenía muchísima curiosidad, pero como siempre no disponía mucho tiempo con ella si no quería levantar ningún tipo de sospecha así que hice que se quitara sus pantys luego de echar el asiento mío hacia atrás hice que se apoyara del volante y meto mi cara bajo su faldita y le empiezo a comer su coñito aunque olía un poco a orina se la continué lamiendo a la vez tiraba de a poco repetidas veces de lo que tenía dentro del culo con eso ella jadeaba más fuerte tras unos minutos disfrutando en su entrepierna la pongo sobre mi verga y ella misma comienza a cabalgar una y otra vez mientras veía hacia arriba –“si, si más adentro” decía ella entre gemidos y a la vez yo pensaba (que más adentro si ni siquiera te entra toda mi verga) luego hago que se gire y nuevamente comienzo tirar pero esta vez con intención de sacársela –“quédate quieta” y maría me sujeta fuerte hasta que sale la primera pelota –“como te puede entrar algo así” eran como pelotas de ping-pong me tomo algo de tiempo sacarle las tres –“por fin te las pude sacar” ella solo jadeaba contra mi pecho, aprovechando le toco su culito y estaba suavecito aceptaba mis dedos sin problema en esa ella se posiciona para coger otra vez y pone su culito en toda mi verga y comienza a bajar despacio pero sin problemas hasta que llega a su límite –“mmm, si…, esto se siente muy bien” –“que perrita tan sucia te has vuelto” después vuelve a subir hasta casi sacársela y vuelve a bajar cada vez más rápido hasta de repente se priva y me apreta con fuerza ...