1. Relatos cortos 8-Simplemente, tú


    Fecha: 05/11/2022, Categorías: Lesbianas Autor: Bella15, Fuente: TodoRelatos

    ... tenía todo un enriedo que era difícil de resolver por más que ella se esforzara. Por un lado, se preguntaba hasta cuando su amiga la iba a cuidar, porque era consciente que había interferido en su vida cotidiana y sentimental. Después de todo, presencio como Sigrid terminó su relación por cuidar de ella y, por otro lado, estaba eso que comenzó a sentir, pero le daba miedo expresarlo porque no sabía cómo reaccionaría la persona a quien quería tanto. Simplemente, se encontraba en un “Estoy enamorada de mi mejor amiga”
    
    —¿Un poco mejor? —se encontró preguntando su amiga
    
    Era ¿Cariño o amor? Lo que sentia realmente, aunque desde la última vez que su amiga la ayudo a bañarse, sintió una mayor necesidad de intimidad y proximidad física. La misma sensación que se encontró experimentando cuando miró aquellos ojos marrones que combinaban perfectamente con ese tono ámbar de su melena.
    
    —Cancelaré mis citas, hoy me quedo contigo —puntualizó.
    
    —¿Qué? No, no, no, ¿Cómo se te ocurre? No puedes dejar a tus pacientes tirados —le reprochó.
    
    —¿Y qué? Tu eres más importante para mí —
    
    Esa frase la derritió, porque de cierta manera le recordó lo atenta y cariñosa que había sido con ella desde que se conocieron. Habían sido compañeras desde la prepa. Llevaban más de quince años de conocerse y aunque Sigrid era lesbiana desde pequeña, Astrid no lo era. Siempre había tenido varios novios y su última relación había durado dos años, pero ahora que ambas estaban solteras, había surgido algo que ninguna imagino.
    
    —Sigrid, aprecio que desees quedarte, pero tienes una vida allá afuera, yo estaré bien —le regaló una sonrisa.
    
    —¿Segura? —la miró desconfiada.
    
    —Sí, confía en mi —pronunció.
    
    —Bueno, cualquier cosa que necesites, no dudes en llamarme —le dio un beso en la frente y se incorporó.
    
    Astrid la vio alejarse y se maldijo por no haber tenido el valor de confesarle lo que sentia, pero una parte de ella creía que la mejor decisión era ocultar sus sentimientos en lo más profundo de su corazón. No tenía caso dañar una amistad que llevaba años por algo que no estaba segura si iba a resultar. Las semanas fueron pasando y cada una seguía inmersa en sus actividades, pero al caer la noche, se reunían en la sala para charlar o ver alguna película hasta que, sin imaginarlo en una de esas noches, se besaron.
    
    Desde ahí en adelante cada que se veían, se besaban con más ganas hasta que un día Astrid, se dejó llevar por el momento y le extendió la mano para ir a la habitación. Tuvieron una noche desenfrenada y llena de pasión, una noche que Astrid jamás olvidaría por todas las sensaciones que su mejor amiga le brindo, sensaciones que nunca había experimentado en brazos de otras personas, pero que, al mismo tiempo, le daba un poco de temor. Y es que, aquel encuentro reafirmo que el gusto que sentía por Sigrid no era pasajero, ni una confusión, sino que realmente la amaba con locura.
    
    Sin embargo, cuando Astrid pensó que realmente su sueño se había hecho ...